Filipinas registra la primera muerte por coronavirus fuera de China

Las mascarillas inundan ya Manila. Sus residentes se muestran preocupados porque su país, Filipinas, es el primero en registrar una muerte por coronavirus fuera de China. Se trata de un ciudadano de 44 años, de nacionalidad china y procedente de Wuhan, el epicentro de la enfermedad. Una confirmación oficial que llega horas después de haber cerrado su espacio aéreo, como Nueva Zelanda esta madrugada y otra decena de países, a los vuelos procedentes de China. Es la reacción de Filipinas mientras le sacude otra realidad sanitaria: su bajo índice de vacunación y los brotes recientes de sarampión y dengue que han causado ya más de mil muertes. Pero la respuesta mundial al coronavirus sigue su curso. En Indonesia, los que regresan a casa desde Hubei y otras provincias sacudidas por el virus, son desinfectados en la escalerilla del avión. Fuera de China se contabilizan 145 positivos en casi una treintena de países. Ninguno, eso sí, en Sudamérica y África, pero con Australia como principal afectado fuera de Asia, con 12 casos. En Europa son 23, entre ellos el británico Kharm Lambert, que está compartiendo en varios vídeos sus días de cuarentena, en los que muestra sus hábitos constantes de higiene. Con un dato para la esperanza que coincide con la baja letalidad del brote. Lambert asegura que ninguno de los recluidos, a pesar de ser portadores del virus, está desarrollando la enfermedad.