En Filipinas un grupo de profesores recorren en un carrito a modo de aula móvil las aldeas más pobres para enseñar a los niños aislados por la pandemia
En un carrito de madera equipado con pizarras y estanterías, cuatro profesores recorren por...
En un carrito de madera equipado con pizarras y estanterías, cuatro profesores recorren por las vías de un ferrocarril, poco transitado en el sur de Filipinas, los pueblos para dar clase a sus alumnos.Niños sin recursos que viven a los alrededores de las vías del tren y no están asistiendo a clases presenciales por la pandemia por coronavirus.El cierre de las escuelas ha dejado atrás a muchos niños que viven en la pobreza y no tienen acceso a ordenadores. Ahora gracias a esta aula móvil pueden escoger libros de lectura para para entretenerse y aprender. Los profesores les enseñan a leer, a contar, sumar y restar.Estudiantes voluntarios ayudan a los profesores a empujar el carrito por los vecindarios. Recorren hasta tres aldeas en un día y dan clase de matemáticas e inglés a más de 60 niños. Comenzaron en noviembre con este proyecto y han estado recolectando material de aprendizaje de donaciones para usar en sus clases. Filipinas ha registrado más de 3 millones de casos de COVID-19 y casi 53.000 muertes por la pandemia. Reabrió a los turistas extranjeros en febrero, momento en el que los casos aumentaron debido a la variante Omicron.