Un espía kurdo robó los calzoncillos de Al Bagdadi para verificar su identidad antes del ataque de EE.UU.
Los restos de ADN en la ropa interior fueron la prueba de que se trataba del líder de Daesh, según las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS)
Rusos y estadounidenses habían dado varias veces por muerto a Abu Bakr Al Bagdadi , pero esta vez no se podía fallar. Había que cerciorarse de que efectivamente se trataba del líder de Daesh antes de lanzar el ataque que acabar con él. ¿Cómo verificar su identidad? Un calzoncillo con sus restos de ADN fue la prueba definitiva.
Al menos así lo aseguran las Fuerzas Demócraticas de Siria (FDS), integradas por kurdos que vienen combatiendo al autodenominado Estados Islámico (EI), según los cuales uno de sus espías logró infiltrarse en el círculo más íntimo de Al Bagdadi y se las ingenió para hacerse con su ropa interior. Gracias a eso, según esta versión, se pondría en marcha la operación «Kayla Mueller» en la que moriría el terrorista más buscado del mundo.
Un destacado miembro de las FDS, Polat Can , ha contado a través de Twitter cómo dieron con él y lograron probar su identidad. «A través de nuestras propias fuentes, pudimos confirmar que Al Bagdadi se había trasladado desde la zona de Al Dashisha en Deir al Zor a Idlib -explica-. Desde el 15 de mayo, hemos estado trabajando conjuntamente con la CIA para rastrear la pista de Al Bagdadi y seguirlo de cerca».
«Una de nuestras fuentes -continúa relatando- fue capaz de llegar hasta la casa donde Al Bagdadi se escondía. Al Bagdadi cambiaba de lugar de residencia muy a menudo. Se iba a trasladar a un nuevo lugar en Jerablus».
1- Through our own sources, we managed to confirm that Al Baghdadi had moved from Al Dashisha area in Deir Al Zor to Idlib. Since 15 May, we have been working together with the CIA to track Al Baghdadi and monitor him closely.
— بولات جان Polat Can (@PolatCanRojava) October 28, 2019
En una serie de mensajes en la red social, Polat Can explica que su fuente, que había logrado llegar hasta Al Bagdadi, «cogió ropa interior de Al Bagdadi para llevar a cabo un análisis de ADN y asegurarse (100%) que la persona en cuestión era el propio Al Bagdadi».
El dirigente kurdo desliza críticas por los efectos de la salida de las tropas estadounidenses del norte de Siria y la incursión turca en esa zona. «Más de un mes después, se tomó la decisión de elimininar a Al Bagdadi. Sin embargo, la retirada de EE.UU. y la invasión turca nos hizo detener nuestras operaciones especiales, incluyendo la caza de Al Bagdadi. La invasión turca causó un retraso en la operación».
Un plan B
Can saca pecho por la labor de las FDS. «Toda la inteligencia y el acceso a Al Bagdadi, así como la identificación de su lugar, fueron resultado de nuestro propio trabajo. Nuestra fuente de inteligencia se implicó enviando coordenadas, dirigiendo el lanzamiento desde el aire, participando y haciendo que la operación fuera un éxito hasta el último minuto».
Según Polat Can, «todos los grupos armados y elementos que rodean la aldea de Barisha eran terroristas de Daesh (EI), operando bajo diversos nombres. En la operación aérea, todos los puestos militares y posiciones fueron señalados».
Por último, señala que el terrorista Abu al Hasán se encontraba en una misión especial en Jerablus para asegurar la traslado de Al Bagdadi a su nueva casa. «Había un plan B para atacar a Al Bagdadi en su nueva casa si se hubiera trasladado antes del ataque planeado en Barisha. Abu al Hasán estaba seguido de cerca por la inteligencia del FDS», concluye su serie de tuits.
Un comandante de las FDS, el general Mazloum Kobani , también se ha referido a la infiltración de un espía de su organización en el círculo cercano de Al Bagdadi en entrevistas con medios estadounidenses. Mazloum aseguró a la cadena NBC que el agente del FDS estaba en el campamento de Al Bagdadi cuando tuvo lugar el asalto, que había ejercido como asesor de seguridad al líder de Daesh y que su traición estuvo motivada por la venganza.
Cuando se ha preguntado al presidente del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., general Mark Milley, sobre el papel de los kurdos sirios en la operación, indicó que no iba a comentar «qué puede o no puede haber pasado con el FDS», pero subrayó que la operación aérea y los soldados enviados al campamento fueron exclusivamente fuerzas especiales estadounidenses.
Por otra parte, el marido de la cuñada de Al Bagdadi se ha revelado como otra figura clave en la caza del líder de Daesh, informa « The Guardian ». Según funcionarios de la inteligencia iraquí, Mohamed Ali Sajid al Zobaie les condujo a un túnel en el desierto en la frontera entre Siria e Irak, donde se encontraron objetos vinculados con el líder terrorista. Los iraquíes indican que hallaron un arma, bolsas médicas, libros religiosos y una pequeña bolsa con mapas y localización dibujadas a mano dentro de una caja.
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