Los enemigos de Trump en el partido republicano

Paul Ryan

Paul Ryan es el presidente de la Cámara de Representantes . Es la voz principal de la oposición republicana frente al Gobierno. De modo que su figura, influyente y respetada, aglutina mucho poder . Sin embargo, Trump parece no querer someterse a su autoridad, lo que hace que la realción entre ambos políticos sea complicada.

Ryan reaccionó ante el coqueteo de Trump con el Ku-Klux-Klan , la organización de extrema derecha y de oscuro pasado que promueve el racismo en Estados Unidos. Después de que el magnate estadounidense hiciera caso omiso a las advertencias de Ryan, se produjo el primer encontronazo . El «speaker» del Congreso explicó en una aparición pública que «quien quiera ser candidato de este partido debe rechazar a todo grupo basado en la violencia o en los prejuicios raciales. Este es el partido de Abraham Lincoln ».

Más tarde, Ryan soltó una frase lapidaria en una rueda de prensa: «No estoy preparado para dar mi apoyo a Trump». La tirantez entre los dos miembros del Partido Republicano aumentó. Ryan rechaza las propuestas antiinmigración de Trump, así como su proteccionismo exhacervado. Y no se esfuerza por ocultarlo.

Esta semana la polémica se ha vuelto a desatar delspués de que el showman pusiera en entredicho que el capitán Khan , un joven soldado musulmán que se caído en combate en la guerra de Irak, fuera un héroe. También criticó el discuro de su padre y la actitud silenciosa de su madre durante la convención republicana. Algo a lo que ha hecho saltar de nuevo a Ryan : «Su sacrificio, y el de Khizr y Ghazala Khan (los padres del soldado muerto), hay que honrarlo siempre . Punto».

Mitch Connell

Mitch Connell es el líder de la mayoría republicana en el Senado, donde representa al estado de Kentucky. A pesar de pertenecer al mismo partido que Trump, tiene una postura combativa frente al estrafalario multimillonario .

En su última declaración y a colación de las críticas de Trump contra el capitán Khan , caído en combate en Irak, Connell manifestó: «Estoy de acuerdo con los Khan (padres del soldado) en que una prohibición de entrada a todos los miembros de una religión es contraria a los valores estadounidenses ». De esta forma, además de desmarcarse de la controvertida política antiinmigración de Trump, Connell quiso mostrar respeto por el militar que murió defendiendo su patria: «Khan fue un héroe americano y, como todos sus compatriotas, estoy agradecido por el sacrificio que hizo ». Una declaración que aprovechó para añadir: «Todos los americanos deberían valorar el servicio de los patriotas que, de forma voluntaria, nos defienden».

John McCain

Después de que Trump desairase la memoria del capitán Khan y a su familia, los miembros del «establishment» conservador parecen querer distanciarse de su candidato para las elecciones presidenciales de noviembre . A Ryan y a Connell se sumó John McCain , el más duro. Al senador de Arizona no le tembló el pulso al emitir un comunicado en el que decía que «aunque el partido le ha concedido la nominación, eso no viene acompañado de una licencia sin límites para difamar a lo mejor de nuestro país ». Hizo hincapié en que las palabras de Trump «no representan al Partido Republicano, sus funcionarios o candidatos».

Además, McCain también quiso dirigirse a los padres del soldado caído en la guerra de Irak: «Somos un país mejor gracias a ustedes. Su hijo era lo mejor de Estados Unidos y la memoria de su sacrificio nos convertirá en una nación mejor. Nunca le olvidaremos».

Pero la enemistad entre Trump y McCain viene de lejos. El senador de Arizona es un veterano del Vietnam, donde estuvo prisionero durante cinco años. No obstante, hace un año, el magnate estadounidense aseguró que «no es un héroe de guerra» . Incluso, recurrió a las burlas para seguir hablando de él: «Me gusta más la gente a la que no capturan».

Jeb Bush, John Kasich y Marco Rubio

Todos ellos fueron candidatos presidenciales, enfrentándose a Trump y, luego, resignándose ante su victoria. Todos ellos han cargado contra él muchas veces y han protagonizado acalorados debates . Como era de esperar, ahora, se han desmarcado de un Trump que ha sido capaz de criticar a un soldado que murió en combate, una «estrella dorada» que trataba de defender los intereses de su país . Una conducta que nada tiene que ver con el caracter estadounidense, que ensalza a sus héroes caídos y de la que los tres ex candidatos a la Casa Blanca se desmarcan.

Lindsey Graham

Lindsey Graham también fue contrincante de Trump para ostentar la candidatura republicana. Al igual que Bush, Kasich y Rubio, no pudo vencer al showman estadounidense y esta semana se distancia de él usando como pretexto su desasfortunado comentaria acerca del capitán Khan y de su familia.

Aunque la relación hostil que ambos mantienen viene de antes. En el verqano de 2015, Trump reveló el número privado del senador de Carolina del Sur en uno de sus espectaculares mítines. Graham no se quedó quieto y maquinó su venganza. No le atacó directamente en un discurso; recurrió a un método mucho más original. Grabó un divertido vídeo en el que aparece destrozando su teléfono móvil de todas las maneras posibles : lo metió en una batidora, lo golpeó con un palo de golf, le clavó un cuchillo, lo aplastó con bloques de hormigón, lo tiró desde una azotea. Una respuesta llena de humor que triunfó en la redes sociales.