Cruzar el Atlántico en un catamarán impulsado por cometas de kitesurf

A 30 kilómetros por hora, el portugués Francisco Lufinha pone rumbo a la isla caribeña de Martinica. Y lo hace en un renovado catamarán que utiliza cometas de kitesurf para generar la energía. Toda una hazaña teniendo en cuenta que ha de cruzar prácticamente el Océano Atlántico entero, unos 6.000 kilómetros. De momento, ha completado la parte fácil. Salió desde la ciudad portuguesa de Cascais hasta llegar a la isla española de La Palma por lo que todavía le queda un largo camino por recorrer en el que se encontrará con grandes dificultades. La principal es la cantidad de residuos en el mar que pueden dañar la embarcación y hundirla, asegura. También se enfrentará al sueño. La diminuta cabina en la que viaja y el constante nivel de alerta en el que tiene que estar, apenas le ofrecen descanso en su aventura por el Atlántico.