El chavismo arremete contra la OEA
La advertencia de la Organización de Estados Americanos de aplicar la Carta Democrática en Venezuela ha provocado malestar en la cúpula del Gobierno de Nicolás Maduro
El Gobierno de Nicolás Maduro no acepta ser cuestionado por la Organización de Estados Americanos (OEA) . Diosdado Cabello , número dos del chavismo y diputado del Parlamento, ha rechazado las declaraciones de Luis Almagro , secretario general de la OEA, que acusan al jefe del Estado de Venezuela de dar un «golpe directo» a la democracia . «Que se meta en Argentina y después hablamos. No hay un organismo más desprestigiado que la OEA, lo que diga su presidente nos resbala… Ese señor tiene una clara tendencia política», dijo Cabello a la prensa este miércoles. Al mismo tiempo, los parlamentarios de la oposición han aprobado este jueves un acuerdo para la activación de la Carta Democrática y el cumplimiento de decisiones de organismos internacionales.
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El jefe de la OEA reaccionó el pasado martes al conocer una sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela que declaraba en desacato al Parlamento por tomar juramento a tres diputados, cuyas elecciones están en proceso de impugnación desde el 30 de diciembre. «Todo aquello que signifique impedir a un solo diputado asumir su escaño es un golpe directo a la voluntad del pueblo . Es concepto esencial de la democracia que el único soberano legítimo es el pueblo y, por lo tanto, interpretar y-o distorsionar lo que este ha expresado en las urnas, afecta a la voluntad popular», señala Almagro en una carta enviada a Maduro.
El Tribunal Supremo es uno de los poderes a merced del Gobierno venezolano
El chavismo se ha valido del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para restar diputados a la oposición en el Parlamento. Henry Ramos Allup , presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, ha tenido que anunciar este miércoles la renuncia de los tres parlamentarios sobre los que pesa una sentencia que les prohibe tomar juramento y una impugnación por parte del Supremo.
El TSJ es uno de los poderes a merced del Gobierno. Esta institución no ha dictado una sentencia en contra del chavismo en los últimos 10 años , además algunos de sus magistrados son abiertamente simpatizantes del presidente Maduro.
Según Almagro, la Carta Democrática Interamericana le obliga a actuar si se ve afectado el proceso político institucional en este país. La aplicación de este instrumento faculta a la OEA para comenzar discusiones destinadas al análisis de la situación de la ruptura del orden democrático en algún país de América.
No se aplica un boicot o aislamiento del país, solo es un mecanismo de orden moral . «Cuando en un Estado miembro se produzcan situaciones que pudieran afectar el desarrollo del proceso político institucional democrático o el legítimo ejercicio del poder… el Secretario General elevará un informe al Consejo Permanente, éste realizará una apreciación colectiva de la situación y, en caso necesario, podrá adoptar decisiones dirigidas a la preservación de la institucionalidad democrática y su fortalecimiento», indica el artículo número 18 de este documento.
Menos aliados
La advertencia de la aplicación de la Carta Democrática Interamericana en Venezuela no tiene, por ahora, detractores en Suramérica. Este país caribeño ya no cuenta con los mismos aliados. La crisis económica , derivada principalmente por la caída en los precios del petróleo, ha reducido el margen de influencia en la región. La salida del kirchnerismo en Argentina –máximo socio del chavismo en Suramérica– ha sido otro golpe para el Gobierno de Maduro. Ante este escenario, el chavismo solo opta por arremeter contra la OEA.