El casco que protege frente al COVID-19 y permite rascarte la cara

No es un casco espacial pero comparte alguna de sus funciones. Mantiene el aire limpio de virus pero, además, nos permite rascarnos la cara o colocarnos las gafas. Todo ello gracias a la incorporación de un guante de plástico, que deja introducir la mano pero mantiene el casco totalmente sellado. Una función similar a la que también incorpora en la parte superior de la cabeza. Ya se sabe por si queremos rascarnos. Todo para para intentar compaginar la seguridad de los equipos de protección con algo más de comodidad. Lleva incluso un tubo conectado a un compartimento para poder ingerir algún tipo de refrigerio o alimento. Y que los profesionales para los que está diseñado puedan así recuperar energía sin perder productividad. La única pega de este invento de tres estudiantes vietnamitas es lo aparatoso que resulta. Debido a su gran tamaño es más incomodo que las máscaras de los trajes EPI. Pero la idea ya ha gustado a una de las mayores empresas del país que ha llegado a un acuerdo con los estudiantes para producir en masa la versión final del casco.-Redacción-