Un camión de combustible bomba deja decenas de muertos en el Kurdistán sirio

Según los kurdos, las milicias islamistas sirias leales a Ankara estarían detrás de la explosión

El tentado en el cantón de Afrin ha sido el más sangriento de los últimos meses en el país AFP

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El coronavirus no sirve para frenar la violencia en Siria donde al menos 45 personas, entre ellas once niños, según informó UNICEF, murieron en un atentado en el cantón kurdo de Afrín, al noroeste del país y bajo control turco desde 2018. Un camión de combustible explotó en el medio de un mercado muy concurrido en los instantes previos al final del ayuno del ramadán y provocó el atentado más sangriento de los últimos meses en el país.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH ) aseguró que entre los fallecidos habría al menos también seis miembros de las milicias islamistas sirias que combaten a las órdenes de Turquía . Ningún grupo reivindicó la acción, pero el ministerio de Defensa en Ankara acusó inmediatamente a las Unidades de Protección Popular (YPG), el brazo sirio del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), al que calificó de «terrorista» y «enemigo de la humanidad». Los turcos tienen una guerra abierta con el PKK desde hace tres décadas.

Dos años bajo ocupación

Turquía lanzó la operación ‘Rama de Olivo’ contra Afrín en enero de 2018 y expulsó del cantón a las YPG. Esta operación provocó un éxodo de miles de civiles kurdos que buscaron refugio en los otros dos cantones del Kurdistán sirio y su lugar fue ocupado por milicianos sirios y sus familias llegados de lugares como Ghouta, en el cinturón rural de Damasco. Desde que empezó la ocupación turca la población kurda apenas representa un 34 por ciento de la población del cantón , cuando antes suponía el 97, según datos obtenidos por el canal Rudaw.

Estados Unidos, principal aliado de las YPG durante toda la guerra contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), condenó un atentado que calificó de «acto cobarde inaceptable». El secretario de Estado, Mike Pompeo , llamó a través de las redes sociales a «un alto el fuego en todo el territorio sirio». La misma condena realizaron las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS), la coalición kurdo árabe liderada por las YPG, cuyo general, Mazloum Abdi , declaró que «se trata de un acto terrorista que ha costado la vida a civiles inocentes» y señaló directamente a «la política destructiva de la ocupación turca» como responsable de «este acto criminal». Según los kurdos, fueron las milicias islamistas sirias leales a Ankara las que están detrás de la explosión y pidieron a la comunidad internacional que presionara a Ankara para la retirada de sus tropas de Rojava (el Kurdistán de Siria).

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación