Brexit
Cautela e incertidumbre entre los españoles residentes en Reino Unido
También hay cierto disgusto provocado por el descalabro de la libra, lo que ha hecho que los ahorros conseguidos a base de trabajo se hayan devaluado tras el referéndum
A muchos españoles que residen en Reino Unido el resultado del referéndum les ha pillado por sorpresa . En general, respiraban un ambiente en el que el Remain parecía la opción dominante, pero el Brexit ya es una realidad y la incertidumbre es una de las palabras que mejor describen el nuevo escenario. ¿Qué pasará cuando la salida de la Unión Europea (UE) se haga efectiva? ¿Deberán coger las maletas y regresar a España? ¿Tendrán que pedir la residencia al Gobierno de su país de acogida? La única certeza hasta ahora es que su poder adquisitivo ha quedado mermado por el descalabro de la libra.
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«Es pronto para sacar conclusiones pero, a medio o largo plazo, a los que vivimos aquí nos afectará », asegura Manuel Rivas, un español de 36 años que vive en Londres desde hace más de un año y que trabaja en el sector de Promociones y Eventos. «En Londres hay muchos ciudadanos de la UE . No pueden coger y echarnos a todos de la noche a la mañana», expresa este joven, quien también recuerda que el Gobierno británico ha dejado claro que Reino Unido tiene dos años para negociar los términos de su salida de la Unión. « No va a ser una deportación », tranquiliza Rivas.
Adriana Costoya Rodríguez es una joven de 23 años que desde noviembre también reside en Londres, hasta donde voló para mejorar su nivel de inglés . Es «au pair» y esta mañana, cuando ha acudido a sus clases, el director de la academia le ha contado que el Brexit podría acabar con su negocio. «El 80% de sus alumnos son 'au pairs' y si a partir de ahora se cierran las fronteras, países como Irlanda serán los elegidos por los jóvenes que unicamente quieran aprender inglés».
«No pueden coger y echarnos a todos de la noche a la mañana»
Un rato más tarde, en el metro, una londinense le ha comentado que la ciudad multicultural de Europa por excelencia no podía cerrar ahora sus fronteras: «No va con su esencia» , le ha asegurado. Después, al llegar a casa, el padre de la familia de acogida con la que vive, le ha explicado que, a corto plazo, las consecuencias para Reino Unido van a ser «devastadoras» aunque finalmente la decisión acabe siendo beneficiosa».
Como se puede leer, en una sóla mañana, esta graduada en Periodismo ha conseguido pulsar perfectamente el espíritu que se vive en la capital londinense donde ella únicamente permanecerá un par de meses más. « Estoy tranquila porque en el mes de agosto me vuelvo a España», suscribe Costoya, quien sin embargo conoce a otros europeos que están más preocupados: «Hay muchas familias, como una pareja de eslovacos que conozco, con hijos y trabajando aquí, que se encuentran un tanto abrumadas tras el referéndum porque desconocen en que situación quedan ahora».
«Se trata de una situación de incertidumbre en la que no sabemos cómo nos afectará a nivel laboral», indica Alberto Moreno de la Gándara, un madrileño de 32 años que trabaja para una startup de biología molecular con sede en Cambridge y a quien, según confiesa, le han escrito «todos sus amigos británicos para pedirle perdón» por el resultado del referéndum.
Además, lamenta que, como europeo , el Brexit signifique para él «la potencial pérdida de una serie de derechos, como el visado, el permiso de trabajo o residencia, cosas que ya teníamos ganadas por el simple hecho de pertenecer a un tratado económico común».
Por su parte, Miguel García Benito, un madrileño de 23 años, llegó hace casi dos años a Edimburgo (Escocia) para aprender inglés. Hoy trabaja por las mañanas en el departamento de Recursos Humanos de una cadena hotelera, ocupación que compagina con las labores de camarero en otro hotel.
«Mi moneda valía más ayer que hoy»
«Incertidumbre y desconocimiento de lo que va a pasar», dice al ser preguntado por su situación en estos momentos. « Mi moneda valía diez céntimos más ayer que hoy », añade indignado y es que, como muchos jóvenes españoles, García pretendía volver algún día, pero ahora se encuentra con que sus ahorros se han devaluado después del derrumbe de la libra.
«Ha sido una sorpresa», insiste el joven, que en sus dos trabajos palpaba, en los días previos a la consulta, un ambiente a favor de permanecer en la UE. Esto se entiende, quizá, porque en el sector de la hostelería el porcentaje de extranjeros es muy elevado y sus compañeros escoceses «estaban muy seguros de que se iban a quedar», relata. «No he hablado con nadie que se quisiera el ‘Leave’», asegura antes de mostrar su disgusto con el resultado del referéndum: « No saben lo que han votado . Esto me impulsa, aún más, a irme», sentencia uno de los alrededor de 200.000 españoles que se estima que residen en Reino Unido.