Boko Haram mata a casi 100 soldados chadianos en un ataque a una base militar
El grupo terrorista asesinó el lunes a otros 70 militares nigerianos en una emboscada
Los militantes de Boko Haram han asesinado a cerca de 170 personas, principalmente militares, en dos sanguinarios ataques terroristas en la región africana del Sahel y la cuenca del lago Chad. Primero, en una emboscada perpetrada por la fracción Estado Islámico de África Occidental (ISWAP) el lunes en estado de Borno, en la que al menos 70 soldados nigerianos fueron asesinados mientras intentaban lanzar una ofensiva contra el grupo terrorista. La segunda embestida se produjo la madrugada del lunes en el Chad, y dejó casi 100 soldados muertos en lo que el presidente del país, Idriss Deby, describió como el «ataque más mortífero contra el ejército en la historia del país». Cerca de 47 personas resultaron heridas.
«He participado en muchas operaciones... pero nunca en nuestra historia hemos perdido a tantos hombres a la vez», dijo Deby, en el poder desde 1990, durante su visita al lugar de los hechos. El ataque contra una base del Ejército de Chad en la península de Boma duró al menos siete horas y los refuerzos enviados al lugar también fueron alcanzados, según recoge AFP. En total 98 soldados muertos, 24 vehículos destruidos -incluidos algunos blindados-, armamento robado y otros soldados, secuestrados. El grupo Jama’atu Ahlus-Sunnah Lidda’Awati Wal Jihad (JAS), una facción de Boko Haram, reivindicó el golpe.
El presidente del Chad, quien prepara «una respuesta contundente», ha decretado tres días de luto nacional. Por su parte, la Unión Africana (UA) condenó el miércoles los «ataques casi simultáneos» en Nigeria y Chad y pidió «solidaridad internacional» en la lucha antiterrorista en el Sahel y la cuenca del lago Chad.
Boko Haram ha intensificado sus ataques en los últimos meses en las islas de la cuenca del lago Chad, donde confluyen las fronteras de Camerún, Chad, Níger y Nigeria. Sus ejércitos llevan años luchando de manera conjunta y con la ayuda de los residentes locales formados en grupos de vigilancia contra los militantes islamistas. La insurgencia de Boko Haram, que estalló en el noreste de Nigeria en 2009, ha matado a más de 30.000 personas y ha obligado a más de 2 millones a huir de sus hogares.
