«El Atlas de la belleza» o la diversidad de la mujer alrededor del mundo
Mihaela Noroc. una joven fotógrafa rumana, ha retratado a mujeres de 45 países diferentes para demostrar que en las «diferencias» está el valor de las personas
«El Atlas de la belleza» es un proyecto personal acometido por la rumana Mihaela Noroc que, tras dejar su trabajo y su país, emprendió un viaje alrededor del mundo con el fin de captar la belleza de lo diferente a través de retratos a mujeres.
Armada con una mochila y la cámara, el proyecto empezó como algo pequeño, pero el inmediato éxito recibido la ha motivado para continuar y, alentada por las buenas críticas, también para hacerlo mejor si cabe de lo que pretendía en un principio.
Noroc cree que los medios se empeñan en mostrar la cara menos amable del mundo, sus conflictos y guerras, luchando simplemente por ser diferentes. Su «Atlas de la belleza» ofrece un nuevo punto de vista: apreciar y mostrar la belleza de la diversidad, preservando laq cultura propia y apreciando y respetando la ajena. Además, la joven fotógrafa rumana, que ha recorrido todos los continentes del mundo excepto la Antártida a golpe de flash, capturando en apenas 30 segundos la esencia de esas mujeres que posan ante la cámara, a veces inexpertas y otras seductoras, sin maquillaje. En otras ocasiones habla con la modelo, si conoce el idioma, si no recurre al lenguaje de signos para conocer su opinión y captar mejor a la persona tras la lente.
Desde las favelas brasileñas a los barrios más conflictivos de Colombia; zonas aisladas en Afganistán, mezquitas iraníes o en la meseta tibetana. Desde Corea del Norte a la selva amazónica; a las elegantes calles de Oxford y al centro de Nueva York o Estambul. En todos esos lugares Noroc ha apuntado y disparado, y se ha llevado un recuerdo de parte de esas culturas, razas y personas. Maneras diferentes de ver el mundo que ahora muestra en «El Atlas de la belleza».
«Después de fotografiar a mujeres en más de 45 países puedo decir que la belleza está en todas partes, y no es una cuestión de cosmética, dinero, raza o condición social, sino sobre ser uno mismo. Nos hacen parecer y comportarnos de la misma manera pero somos hermosas porque somos diferentes. Mi objetivo es continuar y tomar fotos de mujeres de cada país del mundo, para que este proyecto actúe como un espejo de nuestras sociedades, diversas, y sea una inspiración para las personas que tratan de seguir siendo auténticas».