Una madre tiene en un bar a su hijo embalsamado jugando al dominó
Jomar Aguayo, de 23 años, murió en un tiroteo en San Juan de Puerto Rico y a petición de su progenitora en la funeraria convirtieron el cadáver en «obra de arte»
La moda de los velorios insólitos vuelve a Puerto Rico con el caso del joven de 23 años Jomar Aguayo , cuyo cadáver se ha exhibido en un bar de San Juan sentado en una mesa ante una partida de dominó y con una cerveza. El embalsamamiento del cadáver de Aguayo, que murió en un tiroteo, fue encargado a una funeraria de la capital puertorriqueña, cuya propietaria, Tamaris Marín, señaló a Efe que este tipo de velorios responden a un cambio de tendencia en las costumbres.
«No me parece de mal gusto, porque todas las personas tienen el derecho a ser veladas como quieran. Se puede considerar, incluso, una obra de arte », dijo Marín, que reconoció que su funeraria se ha especializado en preparar este tipo de velorios poco convencionales. Marín dijo que se trata del noveno de estos particulares velorios, que se remontan a 2008, cuando la funeraria se encargó del ya famoso «Muerto parao» , nombre que se le dio popularmente al cadáver de Ángel Pantoja Medina, que fue colocado de pie, apoyado en una pared, vestido con ropa de estética juvenil, gafas de sol y una gorra.
El caso fue imitado durante los años siguientes , lo que provocó polémica en Puerto Rico entre quienes aseguraban que se trata de una tendencia de mal gusto y que pudiera vulnerar la normativa vigente.
El Departamento de Salud de Puerto Rico, sin embargo, no ha podido prohibir este peculiar tipo de velatorio s al no encontrar la vía legal para exigir que el cadáver de un fallecido se coloque de forma horizontal o dentro del ataúd. «Hay una opinión dividida respecto al asunto pero nuestra funeraria se limita a dar un buen servicio y complacer a los clientes», aseguró la empresaria, tras apuntar que el coste de este tipo de velorios tan poco usual no es más elevado que los tradicionales.
El «muerto del dominó»
Marín insistió en que se trata de una tendencia innovadora que refleja un cambio de costumbres, pero que en cualquier se adecuada al cumplimiento de la normativa vigente en Puerto Rico.
El caso de Jomar Aguayo llama la atención por exponerse el cadáver del joven en el Bar Carmín de la capital puertorriqueña, propiedad de la madre del joven. La prensa local difundió fotos del fallecido con amigos y familiares abrazados y sorprendidos al encontrar al joven sentado como si estuviera con vida todavía.
No se han difundido muchos detalles sobre las circunstancias de la muerte de Jomar Aguayo, aunque sí se supo que falleció en un tiroteo. El «Muerto del dominó» sigue a una lista de curiosos velorios registrados en los últimos años en Puerto Rico que arrancan en 2008 con el «Muerto parao» en 2008.