Internacional
La derecha aumenta su ventaja ante las elecciones en Portugal
Los sondeos sitúan a Passos Coelho seis puntos por delante de los socialistas
![Pedro Passos Coelho, durante un acto electoral en Coimbra](https://www.abc.es/Media/201510/01/passos-coimbra--644x362.jpg)
Pedro Passos Coelho se afana en captar la atención de los 9,6 millones de portugueses llamados a las urnas este domingo para que pueda renovarse la mayoría absoluta que le ha avalado en esta legislatura. No será tarea fácil, sobre todo si tenemos en cuenta que se ha quedado sin margen por el flanco derecho, pues su único aliado natural posible ya figura a su lado.
En efecto, la coalición Portugal à Frente que lidera el primer ministro sustenta la alianza del Partido Social Demócrata (PSD) con el Centro Democrático Social (CDS) de Paulo Portas. Sus opciones de pactos se acaban ahí. En el caso de que el 27 por ciento de indecisos no incline la balanza hacia su gestión, podría producirse la sorpresa mayúscula de que todo gire hacia una alianza con su enemigo acérrimo, el Partido Socialista (PS), para calmar los mercados y ofrecer una imagen de Gobierno unitario a favor de la estabilidad político-financiera.
Juega a su favor es un factor que Portugal ha hecho los deberes
Por eso, Passos Coelho se aferra a la misma eventualidad, sobre todo porque no ha dejado de ganar terreno en las encuestas a lo largo de los dos últimos meses. Hasta entonces, el PS encabezaba los pronósticos, pero los conservadores se han beneficiado del daño causado a su rival por la entrada en acción del mismísimo José Sócrates, con un juicio pendiente por corrupción tras abandonar el poder en 2011, cuando se vio obligado a pedir un rescate a la troika por valor de 78.000 millones de euros.
Durante las últimas semanas, se hacía hincapié en el empate técnico, pero ahora la situación se ha dado la vuelta: se impondría la coalición conservadora PSD-CDS con un 38%, más o menos, y los socialistas obtendrían alrededor del 31 o 32%.
Por si acaso, Passos Coelho no ha tardado en avisar: «Los sondeos no votan, los que votan son los portugueses». Incluso ha dejado caer que, si no se hace acreedor a la mayoría absoluta, no quedará más remedio que convocar nuevos comicios en el plazo de seis meses.
Prueba superada
Para captar la voluntad de los sufridos ciudadanos lusos, se empeña en esconder que la austeridad seguirá en primer plano y en arrogarse la facultad de representar las posturas más moderadas.
Lo que juega a su favor es un factor incontestable: Portugal ha hecho los deberes y, gracias a esta circunstancia, escapa a la catastrófica situación que vive Grecia.
No obstante, el país vecino acaba de ser sobrepasado por la República Checa y Lituania en la clasificación de las naciones más competitivas del planeta, con lo que ahora desciende al puesto 38. Eso sí, el fantasma de un hipotético segundo rescate exterior no pasó de ser una posibilidad remota.
Hasta el presidente de la República portuguesa, Aníbal Cavaco Silva, hace votos para que las urnas conduzcan a un Ejecutivo «estable y duradero», aunque los socialistas arremeten contra la coalición gubernamental con el argumento de que «para ellos la estabilidad consiste en continuar en el poder».