Una mujer deja a su marido por tatuarse un pene en la pierna
El hombre se lo tatuó en una noche de borrachera como una broma
Stuart Valentino es un hombre de 35 años residente en Hampshire, Reino Unido , que se hizo un tatuaje en su pantorrilla buscando provocar unas cuantas risas... pero la broma le salió cara. S u mujer, Samantha, le dejó harta de que su marido no pudiera acompañarles a ella y a su hija a bañarse durante sus vacaciones.
El protagonista de nuestra historia decidió hacerse un tatuaje fálico en una noche de borrachera, simulando que era su propio pene y que, por su gran tamañao, se salía de su calzoncillo.
Un tatuador y experto en láser se ha ofrecido ahora a borrarle a este padre en apuros su tatuaje de 18 centímetros gratis. Después de ver su historia en «Mirror Online», Anthony Osborne, el dueño de un salón de tatuajes, ayudará a Stuart con «el peor tatuaje que he visto nunca» , algo que éste agradece, además de haber aceptado su oferta.
Según el tatuador, lo que más llamó su atención fue el detalle de que la mujer del pobre hombre le dejara, ya que no hay nada que no se pueda borrar de la piel hoy en día. «Si puedo hacer una cosa buena al año, que sea ésta» , ha dicho.
Además, asegura que no será difícil deshacerse del curioso tatuaje , porque el proceso es simple si no hay muchos detalles, como es el caso.
Osborne prevé que en tres sesiones la fallida forma fálica habrá desaparecido de la pierna de Stuart, que se ahorrará por la generosidad del empresario unos 200 euros por sesión . Esperemos que su mujer vuelva a verlo con otros ojos una vez que su pantorrilla esté libre de bromas.
Noticias relacionadas