Al tanque ruso T-14 de última generación se le cala el motor en pleno ensayo general en la Plaza Roja
Al evento asistían veteranos de la II Guerra Mundial, periodistas, diplomáticos extranjeros y otros invitados que no podrán acudir a la parada militar del 9 de mayo por falta de aforo
Una aparente avería ensombreció ayer el ensayo general del desfile que tendrá lugar mañana en Moscú con motivo del 70 Aniversario de la Victoria sobre la Alemania nazi . Uno de los tanques del nuevo supermodelo T-14 Armata, el último grito de la técnica castrense rusa, se detuvo de repente enfrente del mausoleo del Lenin ante la sorpresa general. El vehículo blindado perdió la formación y fue rebasado por el resto de la columna.
Al evento asistían veteranos de la II Guerra Mundial, periodistas, diplomáticos extranjeros y otros invitados que no podrán acudir a la parada militar del 9 de mayo por falta de aforo en la Plaza Roja. Eran los últimos preparativos antes del desfile definitivo después de una serie ensayos que han sembrado en los últimos días el caos automovilístico en la capital rusa.
Nunca antes como este año se le había dado tanta relevancia a las celebraciones del Día de la Victoria. Los medios de comunicación oficiales llevan semanas machacando a la audiencia con todo tipo de detalles sobre las tropas y el material de guerra que será exhibido. También recordando como nunca antes se había hecho cada batalla, cada episodio de la contienda, cada personaje.
Pero, como subraya el diputado de la Asamblea Local de San Petersburgo, Borís Vishnevski, del partido opositor Yábloko, en toda esta propaganda se está haciendo énfasis «no en el recuerdo de los caídos o en la preocupación hacia los veteranos, sino en el aspecto militarista, en el afán de mostrar los músculos».
Las autoridades anunciaron que este año sobre el empedrado de la Plaza Roja circularán nuevos artefactos bélicos dotados con todos los adelantos tecnológicos, el carro T-14 Armata es el más destacado. Por eso ayer el hecho de que su motor se calara en pleno corazón de Moscú, junto a las tribunas desde donde los veteranos contemplaban el desfile, causó cierta frustración.
El tanque fue presentado por primera vez en público hace unos días. El Ministerio de Defensa ruso le considera el mejor de todos los existentes actualmente en el mundo por su blindaje y su alto grado de automatización. También por su potencia de fuego. Deberá ser sustituido paulatinamente por los poderosos T-90. Está equipado con un sistema de radares capaz de localizar 40 objetivos terrestres y 25 aéreos en un radio de 100 kilómetros. Pero el motor es lo que parece no estar todavía muy logrado, ya que, al parecer, no es la primera vez que se cala inesperadamente.
El presentador de la canal oficial RTR, que estaba realizando la retransmisión, aseguró que al parón formaba parte del espectáculo, algo que después desmintieron fuentes militares. El vehículo terminó arrancando cuando su dotación fue sustituida por expertos de la factoría en donde fue fabricado. La prensa rusa hablaba ayer de un posible error del conductor, que aún no habría tenido tiempo de habituarse a la nueva máquina.
Desde el Kremlin se está fomentando este año una verdadera fiebre por el Día de la Victoria. La cosa está llegando al extremo de que se está persiguiendo a quienes se toman a guasa la celebración. El pasado 25 de abril, un tribunal de la región de Krasnodar condenó a tres chicas adolescentes a 15 días de calabozo por grabar un vídeo bailando junto a un monumento dedicado a la II Guerra Mundial. Otro vídeo, en el que aparecen varios jóvenes bailando frente a un tanque T-34, el más utilizado por el Ejército Rojo durante la guerra contra los nazis, está siendo investigado. Sin embargo, unos escolares que apedrearon esta semana cerca de San Petersburgo a un veterano que estuvo prisionero en un campo de concentración durante la guerra, fueron simplemente amonestados por el director del colegio y sin más consecuencias.
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