Estudiantes turcos exigen templos budistas y 'Jedi' para protestar contra las mezquitas en las universidades

La campaña por la islamización de la educación en Turquía tiene un nuevo campo de batalla: las universidades. Las autoridades islamistas turcas han iniciado un proyecto masivo de edificación de mezquitas en el interior de los campus de todo el país, tal y como anunció el pasado noviembre el presidente de la Dirección General de Asuntos Religiosos (Diyanet), Mehmet Görmez: «Se están construyendo mezquitas en más de ochenta universidades en Turquía. Ya hemos abierto quince mezquitas, y abriremos cincuenta más para finales de 2015 ».

Pero la proyección mental de Recep Tayyip Erdogan va aún más lejos: el presidente turco asegura que le gustaría recuperar el término «külliye» para los centros educativos superiores. La palabra, tomada del islam otomano, hace referencia a un recinto presidido por una mezquita central, a partir de la que se articulan otros edificios auxiliares, como una biblioteca, un hospital o un jardín. «Sería más bonito si dijésemos ‘külliye’ en lugar de campus. El Külliye de Esenboga en lugar del Campus de Esenboga sería más placentero», aseguró el pasado enero, durante la inauguración de un nuevo campus en una universidad privada en Ankara.

Pero en algunos campus, la iniciativa ha provocado creativas respuestas por parte de algunos estudiantes . Después de que el rector de la Universidad Técnica de Estambul, Mehmet Karaca, anunciase la construcción de una gran mezquita en el interior del campus, alegando la existencia de una «gran demanda» entre los alumnos, un grupo de estos ha lanzado una campaña de recogida de firmas en internet exigiendo la construcción de un templo budista, que ya ha superado los 20.000 signatarios. «No puedo cumplir con mis necesidades religiosas porque el templo budista más cercano está a dos mil kilómetros de aquí, y no puedo ir durante la pausa para el almuerzo», se queja irónicamente uno de los firmantes, Utku Gürçag Borataç.

La organizadora de la campaña , Zeynep Özkatip, asegura que la administración de la universidad no la ha contactado a pesar de la «gran demanda» existente para la edificación de un lugar de culto para budistas. «Si creen que construir una mezquita es realista, a diferencia de un templo budista, dado que se necesitan donaciones para su construcción, están equivocados. Ya hemos recibido suficientes promesas de donaciones para completar la construcción», ha declarado Özkatip al diario «Hürriyet Daily News». Özkatip, estudiante de ingeniería, asegura haber recibido amenazas debido a su solicitud. «Vemos cómo irónicamente aquellos que hablan sobre la islamofobia no tienen ninguna tolerancia hacia las otras religiones», indica.

Una iniciativa similar ha sido llevada a cabo en la Universidad 9 de Septiembre de la ciudad costera de Izmir, donde 3.900 personas han firmado para exigir la construcción de un «templo Jedi» , la religión principal de la saga «Star Wars». «En nuestra época, los caballeros Jedi bien educados son cada día menos. Los Padawan [estudiantes de caballeros Jedi, en dichas películas] sin educación no pueden controlar su poder y son forzados a pasarse al Lado Oscuro», afirma la petición. «Con el propósito de educar a los nuevos Jedi, la comunidad necesita estar unida. Para controlar dicho poder, queremos templos Jedi», añade. El universo cultural de «Star Wars» ya ha sido utilizado anteriormente por los jóvenes opositores al gobierno de Erdogan, como algunas caricaturas difundidas durante la revuelta por el parque Gezi, en 2013, que describían a las diferentes facciones enfrentadas como personajes de la popular saga creada por George Lucas.

«Cuando salió la campaña [por los templos budistas], todos nos reímos, porque ha puesto de manifiesto lo absurdo del asunto», explica Setenay, de 21 años, alumna de Diseño Industrial de la Universidad Técnica de Estambul. « Tengo amigos en la universidad que son armenios, siriacos . Si construyes la mezquita, deberías poner templos para ellos también, para budistas, cristianos, etcétera», dice a ABC.

«El asunto es más importante de lo que parece. Por ejemplo, ¿de dónde van a salir los fondos para construir la mezquita? No sabemos nada», indica la joven. « Los estudiantes de diseño no tenemos ni un armario en el que poner nuestras cosas . Esa es la necesidad principal para nosotros, no una mezquita». Sin embargo, Setenay no está de acuerdo con la recogida de firmas. «Es divertido, pero no es serio», asegura. «Desde fuera, al ver la campaña podría parecer que esta universidad se dirige de una forma horrible. Pero, ¿acaso eso le importa al rector?».