Un piloto de British Airways decidió estrellar su avión tras asesinar a su mujer

Por muy tegiversado que pueda parecer, Andreas Lubitz no ha sido el primer piloto al que se le ocurrió estrellar el avión que pilotaba con el pasaje a bordo, como la semana pasada hizo el alemán con el vuelo de Germanwings que cubría el trayecto entre Barcelona y Dusseldorf con 149 personas . En octubre de 2010, a un piloto de British Airways tuvo la misma mala idea aunque con resultado muy diferente, según recoge el diario británico «The Daily Mail».

Robert Brown mató a su esposa y, tras asestarle 14 martillazos, el piloto de la aerolínea británica decidió que se suicidaría al día siguiente a los mandos del Boeing 747 con el que tenía programada una línea de Londres Nigeria con los casi 500 pasajeros y su correspondiente tripulación. Y así se lo relató al juez: «Pensé que era algo tenía que hacer. Quería volar una última vez y chocar la aeronave. Quería que todos ellos rindieran cuentas». Su plan era «volar a Lagos y estrellarlo ahí» aunque también había pensado «colgarme en la habitación del hotel» aseguró en el juicio por el asesinato de su mujer. Afortunadamente, el piloto amaneció enfermo y no pudo llevar a cabo sus macabros planes ya que no pudo ir a volar.

Tras ser detenido por la muerte de su mujer, Brown confesó sus planes en el juicio y aseguró que, después de divorciarse, había advertido a British Airways de que sufría graves episodios de estrés aunque la aerolínea le mantuvo en vuelo, según las declaraciones del piloto.