Strauss-Kahn y sus escándalos sexuales
El juicio que comienza hoy en Lille, sobre la presunta vinculación del ex director del FMI con una red de prostitución, es uno más de los escándalos que jalonan su trayectoria
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123456Presunta violación a una empleada en un hotel en Nueva York
Quizá uno de los mayores escándalos sexuales relacionados con un político fue el que protagonizó Dominique Strauss-Kahn, el entonces director del Fondo Monetario Internacional, en mayo de 2015. DSK fue detenido en el aeropuerto de Nueva York acusado de abusar sexualmente de una limpiadora de un céntrico hotel de Manhattan.
Tras meses de polémica, de una posible negociación con la víctima, y con la sombra de la conspiración detrás de dicha acusación, que le costó a Strauss-Kahn su retirada de la carrera presidencial de 2012, el magistrado Michael Obus, del Tribunal Supremo de Justicia de Nueva York, retiró todos los cargos de violación formulados contra él.
Acusado por una periodista italiana...
A raíz del escándalo en Nueva York, se multiplicaron las denuncias de mujeres contra Strauss-Kahn, cuya fama de mujeriego le precede.
La periodista italiana Myrta Merlino (Nápoles, 1969) afirmó en 2013 que Strauss-Kahn, veinte años mayor que ella, intentó «asaltarla» en un hotel de Davos, donde el por entonces ministro de Economía y Finanzas participaban en una reunión anual.
Las revelaciones de Merlino coincidían punto por punto con el «estilo» descrito por varias periodistas y alguna madre de familia francesas. Strauss-Kahn dio cita a la periodista en su hotel, en Davos. La recibió con una copa de champagne en la mano, vestido «muy a la ligera». Y pasó muy pronto al «ataque», sin ningún «preámbulo».
... y también por una francesa
La periodista y escritora francesa Tristane Banon presentó una denuncia contra DSK en julio de 2011, dos meses después de la presunta violación del ex director del FMI en Nueva York.
Banon, cuya familia es cercana a la de Strauss-Kahn, denunció en la televisión francesa en 2007 que el político había tratado de violarla en 2002, cuando tenía 22 años y le entrevistaba para preparar un libro.
En aquel momento no denunció los hechos por consejo de su madre, pero, tras conocerse la presunta agresión sexual de Strauss-Kahn en Nueva York el pasado 14 de mayo, decidió llevarla adelante. Sin embargo, la causa fue archivada poco después.
Y la madre de la periodista
Anne Mansouret, la madre de Tristane Banon, la joven que presentó una denuncia contra Dominique Strauss-Kahn por intento de violación, afirmó después haber sostenido relaciones sexuales con el ex director general del Fondo Monetario Internacional (FMI), «aceptadas pero brutales».
Las declaraciones de Mansouret, vicepresidenta socialista del Consejo General del departamento del Eure, dieron así un nuevo giro muy tórrido al frente francés del escándalo que rodea a Strauss-Kahn.
«He decidido contar esta historia, en primera personal, harta de soportar a los amigos de DSK decir que es un mujeriego incapaz de violencia. Puedo contar que su comportamiento, en el lecho, es muy obsceno, propio de un soldado de la más baja categoría. En ese terreno, siempre se comporta como un predador: la necesidad sexual despierta en él un proceso de dominación», asegura Mansouret.
Acusado de nepotismo
El Fondo Monetario Internacional (FMI) abrió en 2008 una investigación a su entonces director gerente por un presunto caso de nepotismo vinculado a relaciones íntimas con una subordinada, Piroska Nagy, ex alta funcionaria de la institución, de origen húngaro, que trabajaba en el departamento de África. La investigación buscaba aclarar si Strauss-Kahn favoreció económicamente a Nagy y provocó su despido para salvar su matrimonio.
Vinculación a una red de prostitución
El escándalo más reciente es el juicio abierto hoy contra DSK. El ex director del Fondo Monetario Internacional (FMI) comparece ante el Tribunal Correccional de Lille, acusado como otras 13 personas de haber organizado una red de prostitutas para su servicio, pero con muchas posibilidades de salir absuelto a la vista de las pruebas, informa Efe.
En el sumario se tiene constancia de una quincena de orgías organizadas en Bélgica, París, Washington o Nueva York, tomando como base de operaciones el hotel Carlton de Lille, entre 2007 y 2011 -cuando DSK estaba al frente del FMI-, a las que se dedicaron unos 100.000 euros.
Cuatro de las prostitutas que participaron en esas fiestas sexuales se han constituido en acusación particular y su testimonio en la vista aparece como la principal amenaza para Strauss-Kahn, que teóricamente podría ser condenado hasta a 10 años de prisión y a una multa de 1,5 millones de euros.