Anabela Rodrigues es la primera mujer al frente del ministerio de Interior portugués

Anabela Rodrigues, profesora universitaria de Derecho y Proceso Penal en Coimbra, es la nueva ministra de Administración Interna del Ejecutivo de Pedro Passos Coelho. A sus 60 años se convierte en la primera mujer en asumir la cartera de Interior en Portugal. Por su trayectoria profesional, no será algo que la intimide, ya que fue la primera mujer en doctorarse en 1995, por la Facultad de Derecho de la Universidad de Coimbra y la primera mujer en liderar dicha institución

Ella forma parte de la solución encontrada por el primer ministro luso para ocupar el puesto dejado por Miguel Macedo , quien presentó su dimisión como consecuencia del escándalo de los Golden Visa . Passos Coelho no ha aprovechado esta salida para remodelar el Ejecutivo, siguiendo el consejo de algunos miembros de su partido, cuando falta menos de un año para las elecciones legislativas.

Anabela Rodrigues, independiente, es la cuarta ministra de los quince que forman el Gobierno en el que el equipo inicial de once contaba con apenas dos mujeres. Doctorada en Ciencias Jurídico Criminales, en su carrera asumió funciones como presidente de la Comisión para la Reforma del Sistema de Ejecución de Penas y Medidas y también de la Comisión de Reforma de la Legislación sobre el Proceso Tutelar Educativo. En el 2004 fue elegida por José Pedro Aguiar Branco, entonces ministro de Justicia, para liderar el Centro de Estudios Judiciales (CEJ), y dimitió en el 2009. Un año después rechazaron su nombre para integrar en el tribunal Europeo de los Derechos del Hombre. Ha sido precisamente Aguiar Branco, ahora ministro de Defensa, uno de los primeros en felicitar públicamente a la nueva ministra. «Es una persona con un currículo envidiable que por donde ha pasado ha demostrado toda su competencia. Es un espíritu independiente».

Tras cinco días de interrogatorios anoche el juez Carlos Alexandre aplicó prisión preventiva para cinco de los once detenidos en el caso de los Golden Visa. Uno de ellos, Manuel Palos, director del Servicio de Extranjeros y Fronteras (SEF). Es la primera vez en la historia de la justicia lusa que un juez aplica a un dirigente un órgano policial criminal la medida de coacción más grave y que según la ley se debe utilizar únicamente en casos extremos. En la investigación desencadenada en la llamada Operación Laberinto está en causa crímenes de corrupción activa y pasiva, recibimiento indebido de ventaja, prevaricación, malversación, abuso de poder y tráfico de influencias en la atribución de los visados dorados a ciudadanos extranjeros.