... desdramatizándolo, a lo mejor incluso usando el humor, sonriendo: «Uy, creo que he perdido esa batalla. No pasa nada. En breve mi bolsa negra, que es muy pícara, estará acechando de nuevo y tendré una nueva oportunidad de no dejar que me controle». El drama es uno [+]
...el crack brasileño no ha encontrado en el PSG la felicidad que buscaba. El Real Madrid anda al acecho, pero por el momento Neymar no se moja públicamente. De hecho, con este tuit parece dejar entrever que continuará la temporada que viene en la [+]
...las hienas acechaban al genio más decisivo de la historia de mi club. El Barça se partió en dos y todavía sangra aquella herida. Que la belleza genere odio jamás he podido entenderlo. Que el éxito provoque resentimiento, tampoco. En casa nunca me enseñaron a [+]
Llorona se arrastra en las sombras y acecha a los niños, en un intento desesperado de reemplazar a los suyos. Con el paso de los siglos, su deseo se ha vuelto más voraz... y sus métodos más terroríficos. Tened cuidado con su escalofriante lamento... ella ... de su marido. Anna es una mujer escéptica que trabaja al servicio de una ciudad de creyentes así que se ha visto obligada a lidiar con un montón de fantasmas y supersticiones. Pero también le acechan sus propios demonios. Cuando la llaman a casa [+]
...de Ferrari, ya está más en camino de convertir su deporte en lo que fue siempre. Tiburones al acecho, instinto de supervivencia en la jungla. Un juego de damas permanente: comer o ser comido. «Todavía no soy el Carlos Sainz agresivo de McLaren que se tiraba [+]
...personal, que se rebela frente a los reveses de la Fórmula 1. Enseña los dientes, replica firme? En su primera temporada en el imperio de Ferrari, ya está más en camino de convertir su deporte en lo que fue siempre. Tiburones al acecho, instinto [+]
Si a ERC le importaba «un comino» la gobernabilidad de España, a Pedro Sánchez le han desaparecido las prisas por lograrla. Ya no urge combatir la pobreza extrema que acecha a once millones de españoles, ni rescatar de la precariedad a millones [+]
Madero y esperaba que en minutos más su esposo bajara con su encantadora secretaria, recién duchados y felices, y se metieran en su BMW negro y brillante. Que la dama debía de estar acechando, con su cartera Louis Vuitton abierta y su Bersa plateada a [+]
...investigador, aún hay que comprender por qué está ahí, al acecho, oculto entre otros genes. Al escanear las bases de datos existentes, Nelson y sus colegas encontraron que el gen ya se había identificado con anterioridad, aunque solo en una variante del [+]
...adentro nada malo puede ocurrir. Ya lo sabíamos de pequeños, cuando acechaban los monstruos de debajo de la cama y los fantasmas del armario, y nosotros, los indefensos, nos cubríamos con el edredón hasta la nariz seguros de que era una defensa [+]
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