El Puerto se convierte en el epicentro gastronómico de la provincia durante el fin de semana

Adrián Verano - Fotos: Francis Jiménez

Ni las rachas de viento que se registraron ni las probabilidades de lluvia consiguieron deslucir la primera de las dos citas de las VII Jornadas de la Sal y el Estero , la cual tuvo lugar el sábado en las Bodegas El Cortijo de El Puerto.

La rápida venta de entradas ya auguró, desde hacía varias semanas, que la nueva edición del encuentro gastronómico iba a ser todo un éxito de asistencia. Así, desde minutos antes de las 13:00 horas ya había multitud de personas esperando su turno para acceder.

Hay que destacar que con la adquisición de ésta se incluía un catavino de cristal serigrafiado , tickets para degustar la tapa de los establecimientos presentes, así como obsequios de los partners y diferentes bebidas entre vinos y cervezas artesanales.

Una mesa con asistentes a las Jornadas de la Sal y el Estero de El Puerto de Santa María.

Debido a la situación provocada por la Covid-19, desde la organización de las VII Jornadas de la Sal y el Estero se tomaron diferentes medidas para velar por la seguridad de los asistentes, los cuales fueron alrededor de 250 solo durante el sábado.

De esta manera, además de que el aforo era controlado en cada uno de los espacios en los que se ubicaban los stands, también se exigía el uso de la mascarilla, siempre que fuera posible, y la higienización de las manos con gel hidroalcohólico.

Ramé Restaurante era uno de los debutantes en esta edición.

Para ayudar a que éstas se pudieran cumplir con las máximas garantías posibles también se incluía con el acceso, además de todo lo citado anteriormente, una mascarilla conmemorativa con la imagen corporativa del evento gastronómico.

Una vez que las puertas abrieron pasados unos minutos de la una de la tarde los asistentes, tras hacerse con un asiento en las mesas ubicadas en Bodegas El Cortijo , comenzaron a sumergirse en los sabores de la provincia.

Lo mejor de cada rincón de la Bahía de Cádiz

Durante la primera de las dos citas de las VII Jornadas de la Sal y el Estero se pudieron degustar casi una veintena de tapas, entre las que se encontraban tanto dulces como saladas, acompañadas por diferentes vinos y cervezas artesanales locales.

Los representantes de la Escuela Gastro Osborne.

Así, cada uno de los establecimientos hosteleros participantes presentó entre una y dos propuestas , las cuales destacaban por encontrarse elaboradas con productos provenientes de cada rincón de la Bahía de Cádiz.

Aunque los asistentes no se decantaron por una sola opción, sí que los stands de las nuevas incorporaciones a esta edición fueron los más visitados debido a las novedosas tapas que trajeron.

La croqueta de colágeno de lubina, leche de cabra, chipotle y sashimi de lubina , elaborada por Ramé Restaurante, fue una de las que más aceptación tuvo debido a su innovación.

También la de Dhoma Restaurante, la esfera rellena de salsa mayo-kimchi coronada con una fina loncha de lubina en corte usu-zukuri acompañada de arroz y sazonada y aromatizada con diferentes especias japonesas, fue todo un éxito.

Esta repercusión por parte del público asistente no hizo más que corroborar que la fusión de la cocina tradicional gaditana con la oriental se encuentra en auge y se ha convertido en una opción más del ya de por sí variado mapa gastronómico provincial.

Otras creaciones como las dos de la Escuela Gastro Osborne, la del Restaurante El Laúl, la del Bar Gonzalo, la de Romerijo o las dos de la Heladería y Yogurtería Artesanal Italiana Da Massimo, entre otras tantas, fueron otro éxito.

La tapa propuesta por el Restaurante Puerto Escondido.

Gracias a bodegas como Guitiérrez Colosía o Caballero , así como Forlong o 4 Ojos Wines, se alcanzó un maridaje perfecto consiguiendo una explosión de sabores que no pasó desapercibido para los paladares más selectos.

La cerveza artesanal 1530, Cacao Pico y la ginebra Gipsy Gin también consiguieron dejar un buen sabor de boca en aquellos asistentes que prefirieron decantarse por otras opciones para acompañar a estas propuestas.

Por primera vez se llevó a cabo una cata de aceites, en esta ocasión provenientes de la Sierra de Cádiz. De esta manera, la D.O. Aceites Sierra de Cádiz ha estado presente con su oro líquido.

Un cita también con la solidaridad

Además de los 23 stands que se podían visitar y cuyas creaciones gastronómicas se incluían en la entrada, también había dos más en los que se podía colaborar con una buena causa.

El primero de ellos se encontraba en el Salón Centenario y en éste se podían adquirir diferentes especialidades dulces del Monasterio del Espíritu Santo de El Puerto, las cuales estaban elaboradas por las Hermanas Comendadoras.

Los dulces del Monasterio Espíritu Santo, en El Cortijo.

Además de la repostería tradicional para las fechas navideñas, también se podían encontrar otras tantas con las que acompañar al café de la tarde otoñal o para compartir en un encuentro informal.

Solo a unos metros de distancia se encontraba el de la Asociación La Gaviota de Personas con Diversidad Funcional, en el cual por solo 3 euros se podía comprar vinagre de Jerez.

Gracias a la colaboración realizada con Vinagres de Yema S.L . todo el importe recaudado por cada una de las botellas vendidas iba a parar de manera íntegra a la entidad para que pudiera continuar con la labor que realiza en la ciudad.

La Asociación La Gaviota también acudió a la cita.

Como en la anterior edición, la de 2019, también ha estado presente un nutrido grupo de usuarios de AFANAS El Puerto y Bahía con el Restaurante La alegría de Afanas, ubicado en el 37 de la calle Embalse.

En esta ocasión ha ofrecido a todos los presentes una musaka de berenjena y angula ahumada , tomates confitados y mahonesa de azafrán con obleas, tapa que ha confeccionado con la ayuda del Restaurante El Faro de El Puerto.

Todo un éxito de asistencia

Nicolás Terry, el organizador del evento gastronómico, ha confesado a Gurmé que se siente « feliz y emocionado , encantado de ver a la hostelería portuense más unida que nunca».

Además, en relación a los hosteleros, ha querido hacer hincapié en que «es el mayor homenaje que me pueden dar, que estén aquí, conmigo y con mi equipo, que además este año son más».

Las Jornadas de la Sal y el Estero celebran su séptima edición en El Puerto de Santa María.

Para finalizar, también ha querido explicar que, en cuanto al número de asistentes, «está todo el mundo encantado. Incluso la gente que ha venido de muy de fuera está encantada, nos ha felicitado».

Sin lugar a dudas, la celebración de las VII Jornadas de la Sal y el Estero han logrado dar a conocer, aún más si cabe, las nuevas corrientes gastronómicas en las que la tradición y la innovación se mimetizan creando un nuevo concepto de cocina local.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios