Conservas Senra, lo mejor de Sanlúcar listo para comer

Que la vida da muchas vueltas es algo que tiene claro Fran Senra. Este joven sanluqueño trabajó durante años como periodista en muy diversos lugares, tanto de España como del extranjero. Cansado de su último empleo, decidió volver a Sanlúcar, su hogar, convencido de que su experiencia le facilitaría el acceso a un puesto de trabajo, bien en Cádiz o en Sevilla. Pero no fue así. Dicen que en la necesidad se agudiza el ingenio y Fran, gracias a una conversación con un amigo, se aferró a un pequeño hilo del que fue tirando hasta poner en marcha Conservas Senra en agosto de 2018.

Sentado en un típico bar sanluqueño, ante “uno de los vinos más sociales que puede haber en el mundo”, la manzanilla, Fran recuerda aquellos inicios, cuando regresó en 2016: “Fueron dos años malos a nivel personal, acostumbrado a estar siempre activo, a un sueldo.

De repente te encuentras con que no tienes nada, pero yo tenía claro que no me quería ir de mi tierra, ni de Sanlúcar ni de Cádiz.

Fran fotografiado en la Plaza del Cabildo de Sanlúcar con una bolsa de Conservas Senra. | Foto: Cedida.

Conversando con Manolo Ceballos, éste le recordó algo que haría que se encendiera la bombillita de las ideas de Fran. Sanlúcar posee una gastronomía de muy alto nivel, pero no hay conservas de sus guisos. “Entonces se me encendió la luz, y por primera vez en mi vida no presté atención a los consejos de mis padres, hermanos y amigos. Todos decían que estaba loco, pero estaba decidido a asumir el riesgo“.

Sus padres fueron parte importante del proyecto. El padre le prestó dinero, mientras que la madre enseñó durante meses a varias cocineras a hacer los guisos que ella siempre preparó en su hogar. Todo esto en la fábrica de un maestro conservero que Fran localizó y teniendo claro que el choco al pan frito tenía que estar, “de hecho ahora es nuestro producto estrella“. Todos ellos, en cualquier caso, con la imagen de su abuela Mami, de 97 años, en las etiquetas.

Ahora que los inversores tientan al sanluqueño con entrar en su empresa, recuerda que “nunca voy a perder la esencia de Conservas Senra, que es la de mi familia, la de mis raíces, lo que he sufrido y lo que aún estoy sufriendo. La gente que quiera entrar debe saberlo, y por supuesto quien entre lo hará con porcentajes mínimos“. Ya han sido varios, recuerda Fran, “los que me han llamado para invertir en la empresa, la marca es importante y va conociéndose, que es lo que a mí me interesa”.

Tres de los guisos de Conservas Senra.

Conservas Senra comenzó con el choco a la sanluqueña, “ahora vamos a ponerle alubias o judías y se van a llamar chocos al veranillo, que es muy típico de Sanlúcar”. El choco al pan frito, langostinos al ajillo y manzanilla o el pisto gourmet son otras de las variedades, con alguna aventura en edición limitada como la pintarroja, que solo se vendió por temporada.

Nuevos productos

De cara a final de año, Fran se plantea tener unos 16 guisos en el mercado. En estos días saldrá a la venta el de espinaca con garbanzos, que a pesar de no ser “un guiso marinero, es muy de aquí y de Sevilla y nos lo está demandando el propio mercado”. Y es que Conservas Senra tiene en Sevilla su mayor canal de difusión, sobre todo en abacerías, “que son las que nos está dando mayor beneficio. Después de probar la nueva de espinacas, hay quien ya me ha pedido hasta veinte cajas“.

Junto a las espinacas con garbanzos, también se comenzará a comercializar la berza jerezana. “Y como somos una empresa muy humana”, recuerda Fran, “a partir de ahora todos nuestros guisos tendrán el nombre de la persona que nos haga la receta. Las espinacas con garbanzos serán de mi gitana, que es la mujer de Adolfo, mi socio”.

Detalle de una de las etiquetas de Conservas Senra, con la imagen de su abuela Mami.

Fran también busca nuevos canales de distribución, y ya llega a cuarenta centros de Hiperdino en Canarias. También es factible que próximamente comiencen a verse sus guisos en doce lineales gourmet de Carrefour en Andalucía. Los planes de expansión, en cualquier caso, son amplios, aunque no quiere dar saltos al vacío.

Más allá de las propias conservas, Senra está a la espera de comercializar las pizzas con sus productos en unión con Casa Bona. Fran cree que tarde o temprano este proyecto verá la luz, “va a ser un trabajo arduo pero seguro que sale“.