Nigeria llevaba casi 20 años sin levantar la Copa de África. Mucho tiempo para un país con cultura futbolística. Por eso su capitán estaba tan deseoso de celebrar el título. Así, en cuanto el colegiado pitó el final del Nigeria-Burkina Faso, Vincent Enyeama no lo dudó y lo celebró con el primero que tenía delante... el colegiado. Quería auparle para demostrar su felicidad, aunque como no pudo (tal vez porque se dio cuenta de quien era), fue a juntarse con sus compañeros. Y es que una Copa de África no se gana todos los días...