Sergio Asenjo llegó al Villarreal buscando los minutos que le negaban en el Vicente Calderón. Se ha convertido en un fijo para Marcelino y no piensa en el Atlético: "Necesitaba un cambio de aires, disfrutar y tener sensaciones renovadas". Sobre el rival del sábado, el Barcelona, tiene claro que "es más vulnerable que en años anteriores, pero arriba tiene dinamita".