El Bayern de Múnich arrolló al Barcelona por 4-0, un resultado que este año había sido talismán para el Barça en la Champions porque fue el de la remontada ante el Milan en octavos de final. Pero no en la historia más o menos reciente del Barcelona.
El 4-0 más doloroso hasta ahora para el Barcelona fue el que encajó en Atenas ante el Milan en la final de la Champions de 1994. Massaro marcó dos de los cuatro goles del Milan. Como Müller para el Bayern. Aquella contundente derrota significó el final del 'Dream Team' de Johan Cruyff.
Tres años después, en 1997, el 4 volvió a ser un número maldito para el Barcelona. Sólo que esa vez no fue un 4-0, sino un 0-4 porque jugaba en casa y ante un rival de menor talla como el Dynamo de Kiev. Andriy Shevchenko anotó tres goles en aquella fatídica noche de noviembre que acabó con la aventura europea del Barcelona en esa temporada.