El castillo donde murió la Reina Isabel II abre sus puertas al público tras su luto
El Rey Carlos III busca así rentabilizar las propiedades de la Monarquía británica
Uno de los planes que tenía el Rey Carlos III cuando era Príncipe de Gales era el de abrir al público los palacios que hasta ahora eran de uso privado para los miembros de la monarquía.
Su idea principal era la de reducir a una sola planta las lujosas estancias del Palacio de Buckingham, hasta ahora utilizadas por la Monarca, y abrir al público el resto del palacio. Otros cambios que consideró incluían convertir Balmoral, la casa de vacaciones de la Familia Real en Escocia, en un museo para la Reina y trasladar al Príncipe Guillermo y su mujer, Catalina de Cambridge al Castillo de Windsor.
Y poco a poco sus deseos se están cumpliendo. El castillo ubicado en la localidad de Aberdeenshire (Escocia) abrirá sus puertas el próximo 1 de abril.
Tal y como se ha informado, se podrán visitar todas las zonas del castillo -entre las que se incluyen los salones, las estancias y los jardines- abonando la entrada de 18,5 euros para los adultos y 9,5 euros para los menores de 16 años.
Además, también se puede adquirir una visita muy especial a la que fue la última estancia y favorita de la Reina Isabel II, hasta su muerte el pasado 8 de septiembre. Un tour de dos horas junto a un guía que recorrerá a bordo de un Land Rover todo el terreno que abarca Balmoral. Una entrada no apta para todos los bolsillos pues asciende a 370 euros por persona.
El Rey Carlos III se une así a la moda de las monarquías y casas nobiliarias de enseñar sus residencias. En verano de 2021 el Palacio Real de Estocolmo abrió al público una de las plantas de la residencia oficial de los Reyes Carlos Gustavo y Silvia, concretamente la que habitaba la familia de la Princesa Margarita. En España también existen ejemplos como el Palacio de Liria, una de las residencias privadas más importante de Madrid y vivienda habitual del duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart.
