El secreto que se oculta tras la separación de Amelia Bono y Manuel Martos
La ex pareja, que sigue manteniendo una relación envidiable, tiene muy claro lo que debe hacer para que la rutina no acabe con esta complicidad
Manuel Martos y Amelia Bono son unas rara avis. Han demostrado una gran serenidad y armonía al anunciar su separación matrimonial y continuar siendo, junto a sus hijos, una familia modélica. Ni los rumores sobre los verdaderos motivos de la ruptura, la serpiente de verano de la que ha sido víctima Manuel , ni las maledicencias que pregonan algunos de sus detractores íntimos, han conseguido que la ex pareja haya sacado los pies del tiesto.
Se mantienen fuertes y convencidos de que permanecer unidos frente al vendaval es la mejor y más acertada decisión. Así las cosas, tal y como publicó ABC, siguen conviviendo en la misma casa y pasan mucho tiempo juntos. Pero también disfrutan de tiempo en soledad. Este periódico ha podido saber que tanto Amelia como Manuel han retomado sus actividades en solitario y que no descartan, de ninguna manera, encontrar nuevos compañeros de viaje .
Ese espacio necesario, el gran secreto que esconde su transformación emocional, les permite no caer en rutinas asfixiantes, en discusiones ni enfrentamientos innecesarios. Manuel ha sido visto con amigos y Amelia ha disfrutado de encuentros con amigas conocidas -y no tanto- con las que ha reído a mandíbula batiente . Es tal la buena relación que existe entre todos, que ABC ha podido confirmar que Amelia no dudó en felicitar el 82 cumpleaños a Natalia Figueroa , su ex suegra, con la que mantiene una excelente relación.
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