Rocío Carrasco: «Antonio David no ha sido absuelto porque no ha sido juzgado»
La hija de Rocío Jurado ha mostrado los informes psicológicos que muestran los daños emocionales sufridos todos estos años
«Ha intentado volverme loca, pero no lo ha conseguido». Así de contundente se muestra Rocío Carrasco sobre su ex marido, Antonio David Flores . Una de las clases de la docuserie es desmentir que ella le denunciara por malos tratos: «Yo le denuncio por lesiones psicológicas», reconoce Rocío, «basándome en mi vida». En diciembre de 2016 puso la denuncia en los juzgados de Plaza de Castilla, que se inhiben y la envían a los juzgados de violencia sobre la mujer de Alcobendas. La razón, que las supuestas lesiones se produjeron durante el matrimonio. Y así comenzó este proceso: «Aportamos los informes psiquiátricos y un peritaje oficial, además de solicitar a los juzgados que la Unidad de Valoración de Violencia de Género se encargue de realizar una prueba. Esta petición debería haberla presentado el denunciado como prueba de descargo, pero yo me adelanto»
En su ratificación judicial, escuchamos a Rocío Carrasco en una grabación: «Le cuento al psiquiatra que aparte de tenerme así en estos 17 años, ha puesto en mi contra a mis hijos, ha llevado a mi hija a que me dé una paliza. No me deja vivir, no consiente que viva. Cada vez que este señor sale en una portada y leo lo que dice, yo me tengo que ir corriendo al psiquiatra porque me tiene que subir la medicación. No me duermo ni con pastillas . Este señor ha hecho que mis hijos me odien. Me ha privado del amor, del amor, del cariño, de la confianza de mis hijos. Lo ha hecho en privado y públicamente. A mí me da vergüenza salir a la calle. Que me desmerece como mujer, como persona. Que me coarta. Que me mutila. Que yo tengo un trabajo de cara al público que no he podido trabajar en muchas ocasiones porque no podía».
El informe oficial de los tres especialistas (un médico forense, una psicóloga y una trabajadora social) es demoledor: un cuadro ansioso-depresivo con crisis de angustia y ansiedad generalizada. Sufre síntomas de depresión con insomnio, sensación de tristeza y ansiedad generalizada… La lista de daños emocionales es extensa. Los médicos aseguran que «presenta unas circunstancias de vulnerabilidad personal y socio-familiar que motivan la existencia de lesiones sociales en su dimensión personal, familiar y socio relacional». El informe confirma que ‘describe un estado de ánimo disfórico con afectación emocional, resonancia emocional congruente ante las situaciones que refiere de acoso y manipulación de su imagen pública por parte del padre de sus hijos.’ Todo ello sigue ’un patrón de síntomas ansioso-depresivos que pueden conectarse con los hechos demandados’.
La jueza ve indicios de criminalidad y dicta un auto para realizar juicio, pero es recurrido en reforma y se desestima. Se recurre entonces a la Audiencia Provincial, que decide sobreseerlo de forma provisional a la espera de hechos nuevos. Recurrido ante el Supremo «por una cuestión de forma, no de fondo», deja abierta la posibilidad de reabrirlo: «Pero lo importante es que este señor no ha sido absuelto porque para ser absuelto tiene que haber sido juzgado y no lo ha sido. Nadie ha absuelto a nadie».