El llamativo gesto de Rocío Flores que deja claro sus verdaderos propósitos
La hija de Rocío Carrasco acudió al concierto de C.Tangana en compañía de su padre y de la novia de él
Rocío Flores sabe disfrutar de la vida. Lo demuestra en cada publicación que comparte con sus seguidores en las redes sociales. Despojada de aquellos miedos que le hicieron jurar que nunca se convertiría en un personaje mediático, ahora exhibe sus andanzas a través de las fotografías y los vídeos que sube al mundo virtual.
Flores ha sabido ganarle la partido al tiempo. Flash, flash . Tras haberse sometido a diferentes retoques estéticos, explota su nuevo físico y se deja ver en ropa de baño, contoneándose al filo de la piscina o mostrando escotes vertiginosos. Cuando acaba su jornada laboral, exprime el tiempo libre descubriendo restaurantes y recorriendo lugares de ensueño .
La joven es toda una sibarita y una melómana empedernida. Hace un par de noches se la pudo ver, junto a su padre y la novia de él, en el concierto que C. Tangana ofreció en Marbella. Rocío se dio un baño de multitudes . Saludó con especial triunfalismo a quienes la reconocieron entre tanto rostro famoso. Se mostró cercana con todos los que la vitoreaban, salvo con los reporteros que esperaban, ansiosos, el turno para formularle preguntas.
Tal y como ha publicado Europa Press en su cuenta de Instagram, Flores optó por no entablar conversación con la atrevida periodista que quería saber cómo iba a transcurrir la noche. Rocío es una celebridad y, por supuesto, escoge muy bien con quién habla y sobre qué asuntos. Acostumbrada a ser portada de revista, es evidente que ahora le resulte poco atractivo, interesante o estimulador atender a los reporteros en la cantera de Starlite y desvelar al mundo sus secretos más íntimos. Hablar, sí, pero no a cualquier precio.