Cuando la Infanta Cristina vio por primera vez a Iñaki Urdangarin en 1996 se quedó prendada. Cuentan que no dudó en preguntar por ese rubio y en pedir su teléfono. Vivieron una relación a escondidas y no tardaron en anunciar su compromiso (imagen) en el Palacio de la Zarzuela.. En concreto fue en mayo del 97 cuando unos felices novios anunciaban la gran noticia en el Palacio de la Zarzuela junto a Don Juan Carlos y Doña Sofía.. Mientras que los primeros meses de su relación los vivieron a escondidas, tras el anuncio del compromiso no se separaban. La Infanta Cristina acudía a cada uno de los partidos de su prometido. En la fotografía, Urdangarin dándole un beso a Doña Cristina antes de comenzar el encuentro de balonmano.. También era habitual verles en compañía de la Infanta Elena y su entonces marido, Jaime de Marichalar,. En la imagen, la Infanta Cristina junto a sus hermanos y sus respectivas parejas. Posando durante la fiesta de despedida de solteros que celebraron con sus amigos en el hotel Juan Carlos I de Barcelona dos días antes del gran enlace.. La noche anterior al gran enlace se celebró una cena en el palacete Albéniz de Barcelona. En la imagen, los novios con los Reyes Harald y Sonia de Noruega.. Barcelona se paralizó en aquellos días. La seguridad era máxima: los perros rastreaban las calles y los policías vigilaban cada entrada de la catedral de Barcelona.. Los novios escogieron para darse el «sí, quiero» la catedral de Santa Eulalia de Barcelona, donde se reunieron representantes de cuarenta Casas Reales de todo el mundo.. El 4 de octubre, la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin se casaron ante la atenta mirada de 1.500 invitados. La radiante novia, con un impresionante vestido de corte clásico de Lorenzo Caprile y una cola de 3,25 metros de largo, llegó del brazo de Don Juan Carlos.. Tras la emotiva ceremonia, los invitados se trasladaron al Palacio de Pedralbes, en la avenida de La Diagonal. Sirvieron quinoa real con verduritas y pasta fresca, lomo de lubina con suflé de langostinos y emulsión de aceite.. Dos años después del gran enlace, la pareja daba la bienvenida a su primer hijo, Juan Valentín.. Después nacerían Pablo Nicolás, Miguel e Irene Urdangarin. La pequeña, de 16 años, es la única que sigue viviendo con su madre en Suiza. El resto estudia en ciudades diferentes: Barcelona, Madrid y Londres.. El 6 de diciembre de 2000 llegaba el más mediático de sus hijos, Pablo Nicolás Urdangarin. El joven, que ahora tiene 21 años, es el único que sigue los pasos de su padre en el balonmano. Vive en Barcelona y el pasado mes de octubre debutó con el F.C. Barcelona, bajo la atenta mirada de sus padres. Ha sido el único que ha hablado de las imágenes de su padre con otra mujer.. Un año después tenía lugar su bautizo con el príncipe Kubrat de Bulgaria y Alessía de Grecia como padrinos de la ceremonia oficiada por el Cardenal Arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela.. El tercero de sus hijos, Miguel Urdangarin, llegaba al mundo el 30 de abril de 2002. En la actualidad estudia Ciencias del Mar en Londres.. No era hasta 2005 cuando recibían a su única hija, Irene. La joven, de 16 años, es la única que vive con su madre en Suiza hasta que finalice sus estudios en una prestigiosa escuela.. Los veranos los pasaban en Palma de Mallorca con los abuelos.. En invierno solían ir a Baqueira Beret a esquiar en familia, como hicieron estas pasadas navidades, sin saber que unos días después aparecerían las fotos de Iñaki Urdangarin de la mano de otra mujer.. Juan Valentín es el más discreto de los hijos de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin. El joven, de 22 años, vive en Madrid tras pasar una temporada en Inglaterra para estudiar en la Universidad de Essex. En este momento prosigue sus estudios de Relaciones Internacionales.. El caso Noos estalla y en 2009 se mudan a Washington para escapar de la prensa.. El punto de inflexión del matrimonio llegó con el caso Nóos. El ex duque de Palma fue condenado a cinco años y diez meses de prisión por los delitos de prevaricación, malversación, fraude y tráfico de influencias. Pero ni eso hizo que se separarse de su marido. Siguió a su lado hasta el final.. En 2013, la Infanta Cristina se muda con sus hijos a vivir a Ginebra, donde trabaja para la Fundación La Caixa como directora del Área Internacional. Mientras Urdangarin se quedó en Barcelona, pendiente de su proceso judicial.. En junio de 2018 ingresaba en la prisión de Brieva, en Ávila, tras ser condenado por los delitos de prevaricación, malversación, tráfico de influencias, fraude a la Administración Pública y dos delitos fiscales. Después se trasladaba a la prisión de Zaballa (Álava) para continuar su condena en régimen abierto.. Comenzó a trabajar en la fundación Hogar Don Orione como voluntario como parte de los requisitos de su régimen.. En marzo empezaba como consultor en el despacho de abogados Imaz & Asociados de Vitoria, donde conoció a Ainhoa Armentia. La analista acabaría convirtiéndose en algo más que una compañera de trabajo,. Prueba de ello son las imágenes de la revista 'Lecturas', que fueron publicadas la pasada semana. Aunque la Infanta Cristina se había mantenido al lado de su marido en todo este tiempo, la relación que mantiene con Armentia ha dinamitado el matrimonio.