La boda del Borbón que buscó el amor en un reality de televisión
El hijo del duque de Sevilla y la desaparecida Beatriz von Handerberg ha contraído matrimonio esta mañana en la Catedral de Santa Maria de la Sede de Sevilla
Este sábado contraían matrimonio Francisco de Borbón y Sophie Karoly . El hijo del Duque de Sevilla reunía en la capital hispalense a numerosos amigos y familiares entre los que se encontraba su primo Alfonso de Borbón , sin Eugenia Silva , Hubertus von Honhelohe o Manuel Martos . Su hermana, Olivia de Borbón , que ejerció de madrina, eligió para la ocasión un vestido de Roberto Diz del mismo tono verde al de la Cruz de la orden de San Lázaro de Jerusalén, de la que forma parte el novio como 50 Gran Maestre. Olivia, que acudió acompañada por su marido Julián Porras -quién sufre una enfermedad degenerativa que afecta a su visión- combinó su atuendo con una pamela de dimensiones planetarias de la firma Mimoki.
La novia, Sophie Karoly , impactó en la catedral de Sevilla con un fastuoso vestido de inspiración rococó y escote vertiginoso que cubrió con un velo. Junto a ella, el hijo de la pareja de cuatro años, Francisco Máximo de Borbón Karoly , que fue portador de las arras y a quien vistieron con el uniforme de la orden de San Lázaro de Jerusalén. Tras la ceremonia, los contrayentes y sus invitados, disfrutaron del correspondiente convite.
Amor televisivo
La pareja se conoció hace cinco años de forma casual. Sophie, de origen austríaco, es experta en marketing y comunicación. Por su parte, Francisco especifica en su perfil de Linkedin que es miembro ejecutivo de un holding con sede en Suiza que fue creado en febrero de 2020 y cofundador de otra empresa más veterana.
Siguiendo la estela de su hermana Olivia que en 2002 fue participante de ‘La granja de los famosos’ de Antena3, en el año 2012 Francisco de Borbón decidió embarcarse en la aventura de ‘Secret Princess’ . Un reality que se emitió en la cadena TLC y que reunió a nobles europeos en busca del amor. Al igual que el resto de sus compañeros, Francisco se hizo pasar por plebeyo, buscó trabajo y fijó su residencia en un barrio cualquiera de la ciudad. Un cambio radical.
En el vídeo de presentación, Francisco aseguró ser «tres veces príncipe, el tercero en la línea de sucesión para ser rey de Francia y futuro duque de Sevilla». Aceptó ser concursante de pleno derecho debido a que, a la hora de buscar pareja, su estatus se había convertido en un verdadero handicap: «Nunca sabes si se acercan a ti porque ven que eres un Borbón y quieren ser una princesa o una duquesa».
Cisco, como pidió que le llamaran al ser despojado de coronas, títulos y sirvientes, aseguró que era prácticamente imposible cautivar a mujeres españolas que no cayeran rendidas ante su apellido. No estaba desencaminado, pues al final encontró el amor en Austria. Glückwünsche (Enhorabuena, en alemán).
