Alba Sánchez Vicario: «Ser emprendedora tiene aventuras y desventuras»

La sobrina de Arantxa Sánchez Vicario prueba suerte en el mercado de las pizzas saludables

Alba Sánchez Vicario GTRES
Saúl Ortiz

Saúl Ortiz

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Alba Sánchez Vicario es sobrina de la tenista Arantxa Sánchez Vicario. La joven acaba de lanzar Coliflow, una marca de pizzas saludables que permite introducir este alimento de pasado hipercalórico como parte habitual de una dieta saludable y equilibrada. Un proyecto en el que lleva trabajando más de dos años junto al departamento de I+D de la empresa y cuyo objetivo es «liderar un mercado creciente a través de una nueva generación de pizzas de valor añadido». En conversación con ABC, Alba confiesa que la idea surgió durante un intercambio estudiantil en Los Ángeles, cuando descubrió una pizza similar. Al regresar a España para pasar con su familia la peor época de la pandemia, decidió lanzarse como empresaria y testar su producto a través de la fórmula de ‘delivery’: «En dos fines de semana logré vender más de 400 pizzas. Tras este primer éxito decidí crear Coliflow, una alternativa sana también para deportistas», matiza.

Familia de deportistas

No es para menos. Alba desciende de una familia de deportistas de alto nivel. Aunque su tía Arantxa no pudo asistir a la presentación del producto que tuvo lugar en el Real Club de Tenis Barcelona , cuenta con su reconocimiento y apoyo: «Está ilusionadísima. Las ha probado y le encantan, y a sus hijos también. Ha tenido la oportunidad de probar las recetas de pizza de verduras y pizza de cuatro quesos, pero además se ha lanzado a probar diferentes recetas utilizando las bases». A pesar de tan importante ausencia, Alba estuvo flanqueada por sus familiares más cercanos: «Aunque ella no ha podido venir, me he sentido muy arropada por mis padres, mi hermana y mi tía, además de mi abuela, que no ha querido perderse este momento tan especial». Todos, familiares y amigos, le han ayudado hasta el lanzamiento de Coliflow, ofreciéndole diversos puntos de vista sobre el modelo de negocio o, incluso, con las recetas: «Les encantan mis pizzas porque ha pasado la prueba nutricional, sin duda. Me han apoyado dándome consejos».

A pesar de no querer hablar del dinero invertido ni aclarar cómo ha conseguido la financiación para el proyecto de su vida, Alba reconoce que ser emprendedora es un camino «con sus venturas y desventuras», pero que «soy muy tozuda y si me propongo algo, no dejo de intentarlo». En este sentido, garantiza que ha estado totalmente implicada en todo lo relativo a la marca porque «han sido dos años muy largos, probando hasta dar con una receta que me gustase y que estuviera nutricionalmente balanceada».

A la conquista

Lejos de conformarse con el mercado español, Alba Sánchez Vicario tiene intención de conquistar otros países : «Ahora mismo estoy inmersa en la fase de comercialización de las primeras referencias en España, pero el proyecto nace con vocación europea. Además, espero poder seguir haciendo crecer mi marca con nuevas y diferentes recetas».

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