Campero y rutero
Las características del Skoda Scout le convierten en un excelente aliado para aquellos que se adentran por pistas pero, al mismo tiempo, requieren un buen y capaz familiar rutero. Se trata de un gran excursionista al que medimos en diésel y gasolina

Skoda sitúa el Scout en la esfera de los todocaminos ligeros. No hay mucha oferta de este tipo, y suele ser más cara

El portón trasero del Scout puede ser motorizado por 375 euros

Los vidrios traseros sobretintados suponen un extra de 150 euros

La dinámica del Scout es excelente. En curva se percibe su altura ligeramente superior al Octavia Combi, algo que sin embargo no le compromete

La tracción total y 17,1 cm libres hasta el suelo autorizan al Scout a pistas incluso moderadamente comprometidas

La geometría del puesto de conducción es impecable, con independencia de tallas o corpulencias

Los asientos del Scout comprende un tapizado específico, aunque el que se aprecia en la imagen es opcional (cuero y Alcántara), por 1.305 euros

Volante con decoración en símil madera y logo Scout

El cambio DSG, automático y doble embrague, es de serie en los motores TSI y TDI analizados

Junto al mando que activa el portón, botón del sistema de aparcamiento automático, en un pack opcional que cuesta 1.000 euros
