Daño cerebral adquirido: «Los niños también se pueden ver sorprendidos por este “monstruo”»
Los traumatismos craneoencefálicos o «golpes» son la principal causa de la aparición de estas lesiones
Hoy 26 de octubre se conmemora en nuestro país el Día Nacional del Daño Cerebral Adquirido ; un concepto que, cada vez más, está presente en nuestro día a día y se conoce más información. Sin embargo, a pesar de su uso altamente extendido, ¿sabemos a qué hacemos alusión cuando utilizamos este término? Según Carla A. Carvalho Gómez, psicóloga general sanitaria con formación específica en Neuropsicología y fundadora de Hablemos de Neurociencia , podríamos definir el Daño Cerebral Adquirido como «una lesión que se produce de manera repentina e inesperada en el cerebro como consecuencia de múltiples factores e independientemente de la edad».
¿Pueden los niños sufrir un Daño Cerebral Adquirido?
Por desgracia, la respuesta a esta pregunta es afirmativa, ya que como hemos comentado anteriormente este tipo de lesión se puede producir a cualquier edad. No obstante, quizás, el interrogante que deberíamos plantearnos en este momento es (…).
¿Qué ocurre tras el daño?
Las consecuencias de una lesión cerebral pueden ser múltiples y de diferente índole; desde dificultades a nivel físico hasta déficits asociadas con aspectos cognitivos, sociales y emocionales.
¿Un daño cerebral tendrá siempre las mismas consecuencias?
La respuesta a esta pregunta es un rotundo no. Todo dependerá de diferentes variables, entre ellas, la edad del lesionado y por qué se ha producido el daño, es decir, qué ha provocado que el cerebro sufra una lesión.
En la actualidad, los estudios realizados en la materia han señalado múltiples factores como posibles desencadenantes del daño. Entre ellos, uno de los que quizás llame más la atención sea el ictus. Porque ¡sí, los niños también se pueden ver sorprendidos por este «monstruo»! Sin embargo, no es el único factor precipitante, los traumatismos craneoencefálicos o «golpes» son la principal causa de la aparición de estas lesiones.
El Daño Cerebral Infantil es, entonces, un asunto de familia.
Por supuesto. Cuando los padres reciben la noticia de que su hijo o hija sufre un daño cerebral sus expectativas como padres se ven truncadas, pasando un alto porcentaje de casos por un proceso similar al duelo.
Esta información lo cambia todo. Las expectativas como padres, los planes de futuro… ¡todo! La noticia cae como un jarro de agua fría. Aceptar toda esta información es un proceso largo y, en ocasiones, muy complicado. Las familias suelen atravesar por diferentes fases (negación, ira, negociación y depresión) hasta que finalmente la noticia es aceptada.
Además, el aluvión de información relacionada con la lesión cerebral no solo produce «batallas internas» sino que, además, a nivel familiar el núcleo también se ve afectado. En estas familias suele observarse mayor estrés intrafamiliar, un mayor número de problemas familiares y de pareja, así como una reducción significativa de las relaciones sociales.
¿Cómo dedicar tiempo al ocio, cuando tu hijo o hija depende las 24 horas de ti?
La principal problemática a la que se suelen enfrentar estas familias es la falta de información y, en ocasiones, de concienciación en la sociedad sobre la problemática. El desconocimiento, en la mayoría de los casos, es traducido como sufrimiento por parte de las familias. Aunque si bien es cierto que las confederaciones y asociaciones de Daño Cerebral, así como los profesionales y familiares hacen un trabajo incalculable e inmensurable, todavía nos queda mucho camino por recorrer.
Por tanto, aprovecho estas líneas para hacer un llamamiento a la sociedad en general. Antes de prejuzgar, probad a ser un poco más empático. Y ,¿por qué no? intentad poneros en los zapatos del otro. El simple hecho de que las secuelas del daño cerebral no sean visibles no significa que no existan . De hecho, las más graves suelen ser intangibles e invisibles al ojo humano. Por tanto, antes de juzgar el comportamiento de un padre o una madre en una situación social deberíamos inotentar analizar todos los factores, así y solo así podrás entender la realidad a la que se enfrentan día tras día estas familias. Nosotros mientras tanto, como profesionales, desde Hablemos de Neurociencia seguiremos trabajando codo con codo para ofrecer a los pacientes y sus familias información veraz y alcance de todos.
Noticias relacionadas