La angustiosa carta de una madre relatando el ahogamiento de su hija en una piscina
Desde entonces Mercedes ha intentado dar notoriedad y visibilidad a este suceso para que nadie más vuelva a pasar por lo mismo
Mercedes no lo olvidará nunca. En 2012 su hija sufrió un terrible accidente debido al drenaje de una piscina y desde entonces ha intentado dar notoriedad y visibilidad a este suceso, para que nadie más vuelva a pasar por lo mismo. Aunque, tal y como matiza esta madre, «un accidente es algo que no se puede evitar y esto se podría haber evitado, así que para nosotros fue una negligencia por parte de la empresa que se encargaba del mantenimiento y supervisión de la piscina comunitaria».
Esta es su carta, compartida por los responsables de Segurbaby , quienes recuerdan recuerdan que este tipo de suceso ocupa el punto ocho del decálogo de seguridad infantil en piscinas que forma parte de su campaña #OjoPequeAlAgua contra los ahogamientos de menores en entornos acuáticos :
Hola soy Mercedes y tengo una historia real que explicaros.
«Mi hija casi fallece por ahogamiento en la piscina de mi urbanización. Era un sitio que conocíamos bien desde hacía años y donde nos sentíamos seguros y ese año más porque mi hija ya había aprendido a nadar . Yo estaba allí con ella, vigilando para que nada malo pudiese sucederle . Pero de pronto desapareció y quedó completamente sumergida. Yo que estaba al lado me acerque a ella e intenté sacarla a flote, pero por más que lo intentaba y por más fuerte que tiraba no podía sacarla. Así que pedí ayuda a gritos a mis vecinos.
Mientras intentaban sacar a mi hija del agua (esto no sucedió hasta que apagaron el motor 5 minutos más tarde) me acuerdo que pensaba que cada año morían niños ahogados en piscinas y que ese año me había tocado a mí y en cómo le iba a explicar a mi familia a mi marido que la niña “se me” había ahogado delante de mi porque no podíamos sacarla.
Yo ese día no me podía imaginar que algo así pudiese suceder, incluso en el momento en el que lo estaba viviendo recuerdo que me preguntaba con desesperación ¿Por qué NO podemos despegarla de la pared? ¿Cómo es posible que se haya quedado pegada a la pared? Ni siquiera me di cuenta de que su brazo estaba dentro de la pared de la piscina, dentro del drenaje.
Por suerte, los vecinos se dieron cuenta y enseguida dieron orden de apagar los motores, que no estaban cerca, que no encontraban la llave, que el socorrista se calló mientras iba porque estaba muy nervioso también.
Finalmente, el motor se apagó, el brazo salió de la pared y pudieron sacar a mi hija del agua , un vecino que había sido socorrista años antes la realizó una RCP. Yo estaba paralizada en el bordillo viendo lo que pasaba en estado de shock hasta que una vecina vino a decirme que estaba VIVA, que respiraba, la habíamos salvado.
Tuvimos mucha, mucha, mucha suerte porque yo estaba vigilando, porque alguien escuchó mis gritos sordos porque la voz no me salía del cuerpo, porque mandaron apagar el motor, porque había un socorrista que sabía donde estaba la llave que abría el cuartillo de la depuradora y qué motor tenia que apagar, porque había un vecino que sabía hacer la RCP, y porque mi hija aguantó todo ese tiempo debajo del agua no sabemos cómo sin respirar (igual quedaba algo del reflejo de buceo que tienen los bebés y los niños pequeños).
Todo quedó en un síndrome compartimental severo que hubo q operar de urgencia , después de 3 días en la UCI y una semana en planta volvimos a casa ella sin secuelas yo hundida, me costó muchos años (psicólogo y psiquiatra) superar que aquello nos había pasado y que, aunque la niña estaba a mi cargo no había sido culpa mía, yo no sabía que aquello estaba así, si no jamás la hubiese metido en el agua.
Desde entonces siempre revisó o preguntó al encargado de la piscina donde está la toma del barrefondos o los drenajes de la piscina y antes de que ellas (tengo otra hija) entren a la piscina, yo inspeccionó que todos los tapones estén colocados y no haya ningún drenaje succionando.
Hay que saber diferenciar los agujeros que echan agua (esos no son peligrosos) de los agujeros o desagües que “tragan” agua , ya sea para vaciar la piscina o para limpiar en el caso de las tomas de barrefondos.
Mi hija fue una campeona y yo la mamá más afortunada del mundo. Espero que este testimonio, mi testimonio real pueda ayudar a otras personas, porque… nosotras tuvimos mucha suerte, pero hay otras personas que no han podido contarlo.
Quiero recalcar que esto no sólo les ocurre a niños pequeños, después del accidente de mi hija una chica de 16 años murió en Marina D’Or por el mismo motivo en una piscina de un metro de profundidad. Así que no se fíen de la edad, de que sepan nadar o de la profundidad de la piscina y por favor revisen siempre porque la normativa es bastante ambigua y se hacen pocas inspecciones donde se revise esto.
Muchísimas gracias, de verdad de corazón, he intentado muchas veces darle voz a esto, aunque me remueve por dentro y me haga daño ya que fue muy traumática para mi, y casi nunca me he sentido escuchada. Así que gracias por hacerlo visible y recordarlo cada año al principio de cada temporada de baño».
Noticias relacionadas