Planes para disfrutar en Mallorca con niños

Tanto sus playas como sus actividades de ocio son ideales para disfrutarlas en familia

Laura Peraita

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Hablar de Mallorca en verano es hablar de diversión asegurada para toda la familia. Sus calas y playas de fina y blanca arena, la temperatura cálida de sus cristalinas aguas , los preciosos paisajes de la sierra de Tramontana, los impresionantes acantilados, los coquetos pueblos costeros y de interior... hacen posible tener un «verano 10».

La oferta hotelera de la isla es tan numerosa como variada. Para las familias que viajen con niños encontrar una estancia que se ajuste a sus necesidades es siempre una prioridad para poder disfrutar del descanso con toda comodidad. Desde booking.com , líder mundial en reservas de alojamiento online por el que cada día se reservan más de un millón de establecimientos ( en Mallorca disponen de 3.997 , de los cuales más de 3.000 pertenecen al área de casas y apartamentos), destancan propuestas como el Iberostar Ciudad Blanca.

Este apartahotel de 4 estrellas , situado en primera línea de playa en la bahía de Alcudia, ha realizado una verdadera apuesta por mantener un ambiente muy familiar, con opción a régimen de «Todo Incluido». Basta con dar cuatro pasos nada más salir del apartahotel y cruzar el paseo marítimo peatonal para pisar la arena de su playa, que además de ser muy fina y blanca no quema los pies cuando se camina descalzo. Pasar de la piscina del apartahotel al mar es cuestión de dos minutos.

Así de fácilmente se llega a una amplia playa familiar en la que es posible colocar la toalla a la sombra de los pinos o, para aquellos que lo deseen, alquilar unas tumbonas bajo una sombrilla que disponen de una caja fuerte para dejar los objetos de más valor mientras la familia al completo va a bañarse al mar.

Otra de las características que hacen que esta zona sea ideal para ir con niños es que sus aguas son poco profundas y muy tranquilas, con pocas olas.

Pero para los que busquen algo más que un tranquilo baño, esta playa cuenta con diferentes puestos, como el de Fernando Correa, que ofrece divertidas propuestas para los más deseosos de vivir emociones fuertes como el esquí acuático, volar en paracaídas remolcado por una lancha, montar a toda velocidad sobre un sofá o banana acuáticos... Muchas de ellas se pueden practicar desde los cuatro años de edad.

Los que prefieren la piscina, el Iberostar Ciudad Blanca cuenta con varias opciones para toda la familia.

Dispone de una gran piscina central junto a la zona ajardinada, otra (más profunda) para los más mayores y, para los más pequeños, una zona recreativa acuática con diversas atracciones como toboganes en la piscina (incluyendo uno para bebés), chorros de agua, así como una cómoda zona chill-out para que los padres puedan relajarse sin perder de vista a los más pequeños que se lo pasan en grande.

Además, el apartahotel cuenta con un gran equipo de profesionales que organiza cada día infinidad de actividades de entretenimiento para niños y jóvenes, según sus edades, y también para los padres como pueden ser clases de pesas, zumba, tiro al arco...

Después de tanta actividad, lo mejor es reponer fuerzas. La gastronomía es una de las características destacables de este apartahotel por su gran calidad. Las familias podrán optar por comer y cenar en sus dos restaurantes : uno situado junto a la piscina y el otro, «Medusa», casi a pie de playa donde cada día Rafael «el Cordobés» cocina, entre otros platos, deliciosas paellas de marisco.

Los menús, tanto local como internacional, de ambos restaurantes son muy variados e incluyen carnes y pescados que también pueden ser cocinados «in situ» a la parrilla al gusto de cada cliente. También disponen de amplia zona donde confeccionar ensaladas o elegir verduras, para no perder la dieta para los que más vigilen su alimentación.

Las familias que hayan optado por «Todo Incluido» podrán acceder al restaurante Medusa desde su hora de apertura y hasta el cierre para comer y beber lo que deseen. Los granizados, las tarrinas de helado o la fruta cortada, los bocadillos o dulces harán las delicias de los niños.

Tras la cena, se celebran espectáculos para todos los públicos en una amplia terraza donde los más pequeños podrán bailar y distraerse mientras los padres toman una copa. Al tiempo que se celebra el show, el equipo de monitores del miniclub también está presente para animar y sacar a bailar a los pequeños huéspedes.

Este hotel también ofrece el servicio «Pet Friendly» que, con cargo y bajo petición, ofrece la posibilidad de aceptar perros que no superen los 10 kilos de peso para acceder a una habitación especialmente habilitada con cama para la mascota, balcón y situada junto a la zona exclusiva para poder pasear. Además, a la llegada al hotel recibirán un kit de bienvenida con tazones para agua y comida, además de un juguete.

Para disfrutar del ocio fuera del Iberostar Ciudad Blanca, Mallorca cuenta con excelentes y variadas oportunidades de pasarlo bien.

Palma Aquarium: tras los mares y océanos

Palma Aquarium es un parque marino que recrea fielmente los hábitats y ecosistemas de mares y océanos. Descubrir la naturaleza del fondo marino, su fauna y flora y tener la posibilidad de interactuar con las criaturas del mar es una experiencia única para cualquier tipo de público. Consciente de la importancia de aunar el factor educativo y el de entretenimiento, Palma Aquarium pretende lograr un objetivo fundamental: conocer para valorar y valorar para respetar y proteger.

Desde su apertura ha ido incorporando nuevos ejemplares tanto de especies mediterráneas como de los océanos Índico, Atlántico y Pacífico, hasta alcanzar la cifra de más de 8.000 ejemplares pertenecientes a 700 especies distintas . El recorrido del acuario invita a conocer los diferentes fondos marinos de alrededor del mundo y a descubrir cómo el hombre se ha relacionado con ese medio desde el pasado hasta nuestros días.

Al acceder al recinto, comienza un viaje de descubrimientos a través del tiempo y de los océanos. Cruzando un paseo con forma de caracola, donde la luz se proyecta sobre la superficie del agua, el visitante se adentra en primer lugar en las aguas de Mallorca para descubrir su fauna y flora más características.

Mares tropicales

Alejándose de nuestros mares, el visitante continúa el viaje hacia aguas desconocidas, adentrándose en ecosistemas tropicales propios de los océanos de Asia, América y Oceanía .

A mitad del viaje, el visitante accede a una zona ajardinada que recrea la belleza de los paisajes mallorquines ; una gran extensión en la que se combinan vegetación mediterránea con tanques de tortugas, carpas, doradas y rayas. En esta área también se encuentra una zona infantil y de recreo en la que los más pequeños podrán disfrutar del barco pirata enrocado con sus escondrijos de madera.

Una de las zonas de gran encanto también para los pequeños son los acuarios toca-toca que están concebidos con el objetivo de romper las barreras físicas entre las personas y los animales, y así aprender a escuchar sus sonidos e interpretar sus movimientos. Estos acuarios permiten que el visitante disfrute con los animales, comprobando la textura de los cuerpos y sintiéndolos. Se trata de una información didáctica y amena de animales como la estrella de mar, el erizo o el pepino de mar.

Al adentrarse en la Jungla , el visitante se encuentra en medio de la selva amazónica; su vegetación y la humedad del ambiente convierten esta zona en un oasis para cualquier día de verano. La Jungla es el jardín de azotea más grande de España y uno de los mayores de Europa: un microclima creado para asegurar el bienestar y crecimiento óptimo de la vegetación de la jungla logrando una réplica perfecta de este ecosistema terrestre.

Museo del juguete

La cantidad de juguetes, junto con la calidad, la variedad y una cuidada presentación original hace que el Museo del Juguete esté considerado uno de los mejores de España. Antoni Roig Claro comenzó la colección en 1975 y desde entonces ha adquirido piezas y recogido donaciones de particulares hasta llegar a las siete mil piezas de todo tipo de juguetes. En este museo se puede ver una selección de unas tres mil piezas, las más representativas de esta colección. Entre ellas se encuentran juguetes:

—de todo el mundo: España, Alemania, Japón, América...

—de muchas temáticas: muñecas, teatros, mecanos, caballos de cartón...

—fechados desde el siglo XIX hasta la actualidad.

—de todo tipo de materiales: madera, hojalata, celuloide, cartón...

—con diferentes sistemas de funcionamiento: cuerda, pilas, electricidad, alcohol...

—artesanales, tradicionales e industriales.

Estas piezas son auténticas supervivientes . La vida útil de estos objetos suele ser muy corta. El ochenta por ciento de juguetes se rompen durante los primeros días de jugar o arrincona hasta que son tiradas. Estas aún perduran y son testimonio de otros tiempos, otros mundos. Los juguetes son el espejo de la sociedad, son el mundo en pequeño, una microhistoria donde se refleja la tecnología, el diseño y los valores sociales, pedagógicos y estéticos de cada momento histórico.

Ferrocarril de Sóller

El 4 de octubre de 1913 se inauguró la línea del primer tranvía eléctrico de Mallorca entre Sóller y el Port de Sóller. El ferrocarril de Sóller se caracteriza, entre otras cosas, por ser un ferrocarril de vía estrecha, con un ancho de vía de 914 mm (yarda inglesa) poco común en la actualidad y por presentar un material móvil antiguo muy variado , de carácter detallista y mantenimiento artesanal.

Además, el Ferrocarril de Sóller destaca por el especial y atractivo trayecto que realiza superando la barrera natural que supone la Sierra de Alfàbia, con sus 2,8 km de ancho y 496 metros de alto. Para ello, el ferrocarril, en un tramo de tan sólo siete kilómetros supera un desnivel de 199 metros con una pendiente de 23 milímetros, atraviesa trece túneles con longitudes que van de los 33 hasta los 2.876 metros, sobrepasa varios puentes, el viaducto “dels cinc-ponts” de cinco arcos con luces de 8 metros de altura y cuantiosas curvas, algunas con radios inferiores a los 190 metros.

Se trata de una excursión muy divertida, todo un viaje al pasado, para realizar en familia, puesto que los vagones cuentan con grandes ventanales abiertos que permite admirar el paisaje por el que atraviera el ferrocarril de madera.

Sa Calobra

Playa Sa Calobra está a 38 kilómetros de Sóller , situada entre Morro de sa Vaca y Morro de ses Fel·les, y bajo la sombra de Puig Major (1.445 metros de altitud), la cima más alta de las Islas Baleares . Se llega a ella por una carretera espectacular de 14 kilómetros de curvas –12 de 180 grados y una de 360, conocida como Nus de sa Corbata (Nudo de la corbata)–, que salva un desnivel de 900 metros.

El reclamo de esta playa de arena, grava y cantos rodados, se encuentra tras el túnel peatonal que bordea los acantilados verticales y agrestes, dando acceso a la bellísima y paradisíaca desembocadura del Torrent de Pareis , fuente de inspiración de artistas y donde cada verano se realiza un concierto coral gracias a su acústica excelente .

Las condiciones marítimas desaconsejan el fondeo de embarcaciones, puesto que esta expuesta a vientos de componente noroeste-norte-noreste, lo que convierte esta costa en una zona litoral muy brava y peligrosa para calar sobre un fondo de arena, grava y roca. Aun así, se localizan tres fondeaderos : en el suroeste de la playa, se deberá prestar atención, ya que las golondrinas atracan cerca; en el centro de la cala, frente a la desembocadura del torrente, sobre fondo de piedras y arena, a 11 metros de profundidad, y en el parte norte, sobre un lecho de roca y arena a 8 metros de la superficie.

El castillo de Bellver

Entre las construcciones erigidas a lo largo de la historia de Mallorca, el castillo de Bellver es, sin duda, una de las más originales y emblemáticas. Fue construido entre 1300 y 1311 por orden directa del rey Jaime II de Mallorca y está situado a unos 3 kilómetros del centro de la ciudad de Palma, sobre una colina de 112 metros de altura.

Consta de un edificio de estilo gótico de planta perfectamente circular, que se organiza alrededor de un patio central también circular, con cuatro grandes torres orientadas hacia los cuatro puntos cardinales. La llamada torre mayor o del homenaje , en dirección norte, está exenta del resto del conjunto, mientras que el resto de torres están encastradas al cuerpo principal. Aunque se han intentado buscar precedentes de castillos circulares en los que Bellver podría haberse inspirado, todo indica que la obra mallorquina es una obra innovadora genuina.

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