Las lágrimas de una abuela al recibir el regalo de Navidad de su familia: las viejas cartas de amor de su marido fallecido
Son las primeras fiestas en la que esta mujer está sin su marido. Por esta razón, sus hijos y nietos decidieron hacerle un regalo muy especial
La Navidad de este año no está siendo fácil para Barbara Shackleford , residente de Virginia (EE.UU.). Son las primeras fiestas en la que esta mujer está sin su marido Robert, que murió el pasado mes de mayo por una insuficiencia cardíaca. Por esta razón, su familia decidió hacerle un regalo muy especial .
Ha sido gracias a una de sus nietas, Lauren Shackleford, por la que la historia de Barbara se ha hecho viral. Y es que ha sido en Twitter donde la joven ha compartido la reacción de su abuela al ver el preciado regalo.
« Mi abuelo falleció hace 7 meses, así que esta es la primera Navidad de ella sin él en 59 años. Para Navidad decidimos regalarle las cartas que ella y mi abuelo se escribieron en 1962 mientras estaban en la universidad. Él las estuvo guardando todos estos años », escribe la joven en un tuit.
En el vídeo se ve como la familia entrega una misteriosa caja a la abuela como regalo. «En amoroso recuerdo de Robert D. Shackleford», dice el grabado de la misma, refiriéndose a su difunto esposo. Al leerlo, Barbara no puede contener las lágrimas.
Al abrir la caja, la mujer se emociona aún más al ver el contenido de la misma: las cartas que ella y su marido se mandaron cuando eran estudiantes.
My grandpa passed 7 months ago so this is my grandma’s 1st Xmas w/o him in 59 years. For Christmas we decided to gift her w/ letters we found her & my grandpa wrote to each other in 1962 while they were in college. He kept them all these years ❤️ pic.twitter.com/raRvAWxqW5
— L 👅 (@ForeverLAS_) December 25, 2019
La familia encontró por casualidad las cartas revisando las pertenencias del difunto. Entonces, pensaron que podría ser un gran regalo. Y así ha sido. Laurent ha asegurado que su abuela no para de repetir «una y otra vez que es el mejor regalo que podría haber recibido ».
Hoy, la caja con las letras se encuentra en una cómoda del dormitorio de Barbara Shackleford.