Maternidad
Fertilidad: «Nuestra edad biológica sigue su curso, aunque nuestra mente sea joven»
Opinión de Rocío Núñez Calonge, doctora en Biología y experta en Reproducción Asistida y Bioética
Al margen de la situación personal que a cada mujer le ha tocado vivir, el deseo de maternidad, cuando llega, lo hace con un impulso que sortea todos los obstáculos . Las que ya han sido madres pueden contar su experiencia acerca de los cambios que tener descendencia provoca en la vida: la maternidad es una de las tareas más exigentes a las que se puede enfrentar una mujer . Los sacrificios son muchos pero también las satisfacciones y es generalizada la sensación de que la experiencia es única y merecerá la pena.
Uno de esos esfuerzos puede ser el tener que recurrir a las técnicas de reproducción asistida. La necesidad de tener un hijo se convierte en algo vital que transforma en bruma todo lo que nos rodea y que nos impulsa a luchar hasta el final.
En la actualidad, con las técnicas de reproducción asistida, parece que cada vez es más fácil ser madre: sin pareja masculina, con pareja femenina, con problemas de fertilidad, mayores de 40 años… Las redes están inundadas de anuncios que prometen conseguir un embarazo en los casos más difíciles. No hay impedimentos para conseguir la maternidad. O eso es lo que vemos constantemente. «El momento es ahora», oímos continuamente.
Y tras intentarlo sin éxito durante más de un año, cuando cada vez que baja la regla aumenta la ansiedad, la pregunta es recurrente: ¿Es ahora el momento? Y es que no podemos abstraernos del momento actual, en medio de una pandemia mundial, una situación económica complicada y un futuro plagado de incertidumbre.
Las dudas que ya teníamos se suman a las nuevas. Son muchos los problemas que se añaden a los que previamente existían: un empeoramiento de las condiciones económicas de las parejas más jóvenes, incremento del paro, el aumento en las listas de espera de los tratamientos públicos de reproducción asistida, la dificultad para pagar un tratamiento en un centro privado…
Pero el deseo sigue ahí. La maternidad es un proceso complejo, que se complica aún más cuando hay que recurrir a la reproducción asistida, donde aumentan los interrogantes, el más importante de ellos: «¿Lo conseguiré?».
En mi opinión, hay que pensar en el nuevo año como si fuera otro cualquiera. Los centros de reproducción asistida son absolutamente seguros en cuando a medidas anti COVID, y las técnicas, cada vez más avanzadas, consiguen mejores tasas de gestación. Los impedimentos que nos ponemos, si no los mismos, serán otros, pero existirán siempre. El miedo a lo desconocido, a lo que vendrá, lo tenemos dentro de nosotros mismos en todos los ámbitos de nuestra vida. Con pandemia o sin ella, en cualquier circunstancia. Pero la decisión, al final, es nuestra.
Sólo hay que tener en cuenta que el mayor condicionante es la edad. A pesar de que las noticias nos informan de embarazos en mujeres famosas con edades rondando la cincuentena, no debemos confiar más que en la opinión de los expertos, no en las redes sociales o la prensa rosa. Nuestra edad biológica sigue su curso, aunque nuestra mente sea joven.
Si has decidido ser madre y tienes cerca de cuarenta años, no esperes. Pero si eres más joven y tienes dudas, si crees que no es el momento adecuado, olvídate de la presión. Acércate a tu pareja, recupera la intimidad. Vive. Espera. El momento de ser madre es cuando tú lo decidas. ¿Será el 2022 ese momento? Eso sólo depende de ti.