Educación
«Para emprender no hay edad, se puede hacer siendo niño o mayor»
La nueva entrega de «Aprendiendo a emprender» de StartInnova tuvo lugar en el Colegio Obispo Perelló con el empresario Juan Luis González
La cuarta edición de StartInnova , competición de simulación empresarial, ha celebrado su primera charla digital en el Colegio Obispo Perelló de Madrid . Para esta ocasión se ha contado como invitado especial a Juan Luis González , un empresario a quien un amago de infarto a los 39 años le dio un vuelco a su vida. Pasó de ser un alto directivo, con una gran actividad laboral y continuos viajes, a dirigir Orange3 , una empresa familiar de venta de naranjas, donde volcó todo su conocimiento en posicionarla en el mercado nacional e internacional y convertirla en una tienda online de éxito. Hoy, además de ser director general de Orange3 es consejero de la Agencia de publicidad y medios Somos R*.
Es licenciado en Gestión Comercial y Marketing por ESIC , tiene el Honours Degree en ADE por la Universidad de Lincolnshire Humberside, además del Programa Superior en eCommerce por la Dublin Business Scholl y un MBA por la Camilo José Cela. Además, saca tiempo para ejercer como docente en ESIC en los programas GESCO, EMBA, MDMD, PSDM, PSDV y PSRM.
Durante la charla respondió a las numerosas preguntas que los alumnos de todos los colegios participantes de esta nueva edición de StartInnova habían preparado para ahondar más en la fase de «Aprender a Emprender».
Juan Luis González explicó que para emprender no es necesario tener una edad concreta «se puede hacer a cualquier edad, ya sea temprana o avanzada. Los años no pueden ser un impedimento , lo importante es tener una buena idea».
Explicó a los alumnos presentes en la sala, y a los que seguían la charla por streaming, que no hay una única clave para el éxito, «es un cúmulo de circunstancias, pero sobre todo hace falta tener ganas, formarse y trabajar y trabajar ». Confesó que, antes de llegar a director general, también pasó por muchos puestos diferentes en distintas empresas y, en sus inicios, incluso, fue camarero y repartidor de pizzas.
También advirtió que en los negocios «nunca te puedes relajar» y que es mejor tener competencia, «puesto que te ayuda a ser mejor y a sentirte forzado a seguir trabajando duro y ser creativo para que la empresa sea evolucione de forma rentable cada día».
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