Un fondo británico, a punto de comprar Bimba y Lola

La firma, propiedad de los hermanos Domínguez, un «bombón» para los inversores en el sector de moda

Fachada de una de las tiendas de Bilba y Lola

María Luisa Funes

Casi todo tiene un precio. Y Josefina, Francisco Javier y Jesús Domínguez lo saben. Ellos, que fundaron la Sociedad Textil Lonia tras separarse de su famoso hermano, el diseñador y empresario Adolfo Domínguez , podrían estar en conversaciones para vender su gran «buque».

Adolfo Dominguez compró hace años a sus hermanos sus participaciones en la marca homónima. Ahora que ellos están a punto de desprenderse de Bimba y Lola, surgen rumores sobre nuevas ofertas en liza que podrían incluir la participación de los hermanos Domínguez en la Sociedad Textil Lonia (STL), de la que Puig es accionista, que incluye las marcas CH Carolina Herrera y Purificación García.

Y es que los fondos de inversión se han aficionado a incluir en sus portfolios -a veces cargados de aburridas pero rentables marcas desconocidas para el cliente final- a empresas de moda de nivel que aún puedan tener potencial de crecimiento. La batalla por la compra de Bimba y Lola , que fuentes del sector afirman tendrá su fin el 31 de julio, parece que se adjudicará a Permira , un potente fondo británico que habría pujado hasta 400 millones de euros, para lo cual se habría batido en duelo con el norteamericano Carlyle .

Competencia feroz

Permira, que el año pasado salió del capital de Grupo Cortefiel, compraría hasta un máximo del 75 por ciento del capital de la empresa. Lo que inició como una ampliación de capital para financiar la expansión internacional de Bimba y Lola, parece que se ha convertido en una venta en este entorno de competencia feroz .

Bimba y Lola fue, desde el inicio, una marca extremadamente parecida a Purificación García y -a otro nivel- a C H Carolina Herrera , tanto en el diseño de sus prendas, como en la imagen de sus tiendas. Si bien en estos 13 años desde su creación ha sido una historia de éxitos, ahora mismo la competencia fiera de las propias marcas de la Sociedad Textil Lonia y de Uterqüe -de Inditex- probablemente haga necesaria una mayor diferenciación y una redefinición de su posicionamiento para lanzarse al extranjero.

Del mismo modo que Bimba y Lola está siendo un «bombón» para los inversores en el sector de la moda, como lo han sido recientemente Pronovias, Cortefiel, Tous o El Ganso, aún lo es más la Sociedad Textil Lonia (STL), que la supera con creces. STL es la segunda empresa del sector de la moda en Galicia y consolida su posición y sus ventas en múltiples países del mundo. Si Bimba y Lola cerró el anterior ejercicio con 180 millones de euros en ventas, Lonia lo hizo con 331 millones y una red de 150 tiendas -entre propias y franquiciadas- y 400 corners.

Los fondos buscan que las empresas adquiridas generen valor principalmente por su posible crecimiento fuera de nuestras fronteras, pero las exigencias de los hermanos Dominguez en cuanto a precio han hecho que algunos de los postores se echaran atrás o no participaran en el proceso de compra de Bimba y Lola, tal y como fue el caso de L Catterton, el fondo que absorbió a L Capital, del grupo Vuitton y Bernard Arnault . En este «segundo ataque», el target sería la «presa» de mayor tamaño, STL, y la lista de contendientes podría incluir a algunos de los candidatos que se quedaron en puertas en el anterior embite. ¡Hagan juego, señores!

Un fondo británico, a punto de comprar Bimba y Lola

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