La bufanda-manta que arrasa este invierno
La prenda que lanzó Zara a principios de la temporada se ha convertido en el complemento más extendido entre las españolas
El que parecía que iba a ser el invierno de los ponchos y las capas, gracias al que lanzó Burberry y que causó furor entre las famosas ha acabado siendo el invierno de la bufanda-manta que sacó Zara aunque fue rápidamente plagiada, copiada y versionada por otras marcas y por la piratería a todos los níveles.
Más que una bufanda es una pañoleta de lana con enormes cuadros de diferentes tonalidades aunque la que ha causado furor es la más clarita, con fondo beige y enormes cuadros en los colores típicos del estampado tartán: rojo, verde, amarillo y azul.
Aunque cumple a la perfección la función de bufanda, en otras ocasiones y con un cinturón puede convertirse en un poncho. Gracias a sus enormes dimensiones, la bufanda-manta ha triunfado entre las más jóvenes que la han convertido en su «must» y le han dado multitud de usos para conseguir ese look bohemio hippy-chic de falso desaliño que consiguen después de pasar horas delante del espejo dándole vueltas y más vueltas.
Lo cierto es que la prenda original, de suave tacto, ha acabado en todos los mercadillos y tiendas «low cost» con una calidad, por supuesto, muchísimo peor, pero a muy bajísimo precio (hasta 2 euros en algunos establecimientos de dudosa legalidad) por lo que es difícil no pasar el día sin ver más de ya no una o dos, sino cinco o seis jóvenes estudiantes, blogueras, «it girls», «fashionistas», etc... con la pañoleta enrollada alrededor del cuello cual boa constrictor en pleno ataque.