Vargas Llosa reniega de Villa Preysler

Pilar Vidal

El Nobel, en cuyo polémico cuento degrada sus sentimientos hacia Isabel y da a entender que vivía agobiado, tenía un mayordomo, usaba cremas y disfrutaba de menús especiales a diario

Ignacio Camacho

Seis palabras

Para dimitir hace falta dignidad, un sitio donde ir cada mañana y aprender a decir en voz alta «ya estoy yo en mi casa»