La sargento Martínez, de la guerra de Irak a las pasarelas
Scarlett Martínez, de la Guardia Nacional de EE.UU., va a presentar su primera colección de moda, una pasión que descubrió en plena guerra
![Scarlett Martínez muestra para ABC dos de sus diseños](https://s1.abcstatics.com/media/estilo/2016/02/03/scarlett-martinez--620x349.jpg)
A Scarlett Martínez siempre le ha ido la acción. Por eso, esta texana de 31 años hija de colombianos se alistó hace más de una década en el Ejército estadounidense y por su cabeza rondaba la idea de prepararse para entrar en el FBI o la CIA. Pero cuando menos lo esperaba descubrió una vocación oculta. En plena guerra de Irak, hace unos diez años, le dio por hacer tatuajes a sus compañeros de armas y uno de ellos le advirtió de que, más allá de la disciplina castrense, tenía un talento que debía explotar. Al principio era renuente, pero finalmente se decidió a probar con el diseño de moda. Entre guardia y guardia, trazó unos bocetos de unos trajes algo exóticos que llevó a un modisto local para que los confeccionara. De ese modo, regresó a EE.UU. con las primeras prendas de lo que iba a ser una nueva carrera y cursó estudios de diseño.
Ahora la sargento Martínez combina su puesto como reclutadora en el cuartel de la Guardia Nacional en Fort Lauderdale (Florida) con su pasión por la moda y se prepara para presentar la próxima primavera en Miami su primera colección de trajes en un desfile en solitario. Con la mayor naturalidad, asegura que compatibilizar ambas profesiones es «bien fácil» para ella. De hecho, subraya que estar en el Ejército le dio la oportunidad de acceder al «negocio del fashion».
Martínez, madre soltera de dos niñas, aprovecha sus días libres en el cuartel para dedicar tiempo a la moda. Sin embargo, sabe que en cualquier momento debe atender la llamada del deber . Según recuerda para ABC en el Miami Hispanic Cultural Arts Center, donde tendrá lugar su primer desfile, en 2011 participó en una misión en Kuwait y, como ya no podía dejar de diseñar, empleó uno de los dos macutos que le permitían para llevar un maniquí. «Todo el mundo estaba curioso. Se preguntaban: “¿Qué lleva esta niña, que parece un humano?”», relata entre risas. El tubo en que se sostenía el muñeco, como no cabía en su equipaje, acabó yendo con la impedimenta y el armamento.
Pero no todo han sido momentos felices en la dura vida en el frente . Una noche en Irak, un grupo de 176 prisioneros de Al Qaida a los que estaba custodiando se alzó y la emprendieron contra ella con unas piedras elaboradas con una mezcla del té que les daban los militares y la tierra del suelo. « Perdí el 40% de la visión en el ojo izquierdo , pero eso no me ha parado y he podido seguir en el Ejército, porque el que uso para disparar es el derecho», explica Scarlett Martínez.
Por el momento, no se plantea dejar ninguna de sus dos facetas, aunque admite que si triunfara en las pasarelas podría abandonar la milicia. Ambición no le falta. Ha diseñado un vestido para la mismísima Michelle Obama y le ha escrito una carta para ofrecérselo, aunque la primera dama no le ha contestado. Por ahora.