Sara Carbonero y Casillas, separados por más de 8.000 kilómetros

Después de unas vacaciones en familia, el portero se ha incorporado al trabajo en el FC Oporto

Sara Carbonero e Iker Casillas en la boda de unos amigos INSTAGRAM

ABC.ES

Tras unas semanas de descanso muy intensas para la pareja en compañía de sus seres queridos, a Iker Casillas y Sara Carbonero les toca volver a la rutina del día a día.

La pareja comenzó sus vacaciones en el Algarve portugués, donde pudieron combinar aventura, diversión y turismo. Posteriormente, viajaron hasta el pueblo del portero, Navalacruz (Ávila), antes de volar hasta la isla de Menorca donde disfrutaron de la compañía la presentadora Isabel Jiménez y su marido Álex Cruz . La última parada fue en el pueblo natal de la periodista, Corral de Almaguer en Toledo.

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Ahora, con el comienzo de la pretemporada el portero del FC Oporto ha viajado hasta México , donde el equipo de Sérgio Conceição se enfrentará al Cruz Azul y el próximo miércoles al campeón Chivas de Guadalajara. Las dudas sobre el futuro del jugador en el equipo portugués quedan por tanto despejadas, ya que eran muchos los que veían plausible la marcha del guardameta . Sin embargo, Casillas ha renovado su contrato hasta el año 2018.

Mientras Casillas está en México, a más de 8.600 kilómetros de Sara Carbonero ylos pequeños Lucas y Martín, su familia visita rincones perdidos con mucho encanto además de seguir visitando Oporto, la ciudad de la que han hecho su hogar. En una fotografía que Carbonero ha publicado en su perfil de Instagram comentaba: «No todos los que deambulan están perdidos. J.R.R. Tolkien #redescubriendoestaciudad #SantaCatarina #Porto #perderseparaencontrarse #buenasnoches».

No todos los que deambulan están perdidos. J.R.R. Tolkien #redescubriendoestaciudad #SantaCatarina #Porto #perderseparaencontrarse #buenasnoches

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La periodista ha subido imágenes a la red social, en las que se puede ver el reencuentro de sus hijos con sus amigos, poesía callejera, así como su « nuevo vicio confesable »: los mirtillos ecológicos, que también apasionan a su hijo Martín.

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