Así salieron del armario las estrellas gais de la música

Pablo Alborán es el último en sumarse a la larga lista de artistas que han salido del armario en el mundo del pop

Nacho Serrano

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La vergüenza, la incomprensión, la intolerancia, el miedo a decepcionar o a dejar de vender discos y entradas de conciertos han hecho que muchos músicos homosexuales guardaran su identidad sexual en secreto durante años, incluso décadas. El cantante malagueño Pablo Alborán ha sido la última estrella del pop en desvelarla para sentirse «más feliz», y lo ha hecho través de su cuenta de Instagram. ¿Cómo lo hicieron otros grandes artistas que salieron del armario?

Uno de los que hizo algo parecido a Alborán fue nuestro representante en Eurovisión Blas Cantó , que hace tres años sorprendió a sus fans insinuando su bisexualidad al comentar en sus redes sociales: «De momento nadie se ha metido en la cama de ningún ex ni de ninguna ex mía». En nuestro país, otros artistas como Mónica Naranjo han relatado que han tenido amantes de su mismo sexo, pero en su caso prefiere no definirse como bisexual, «porque definirse es una estupidez como una casa», opina la cantante. También fue algo ambiguo hizo Miguel Bosé en 1980, cuando afirmó: «Bisexual sí, pero no homosexual».

La integrante de Fifth Harmony Lauren Jáuregui salió del armario en 2016 a través de las redes, posteando una foto en la que aparecía besándose con Lucy , la hija del cantante Carlos Vives . Pero otros como Adam Lambert (el actual cantante de Queen) han preferido hacerlo con la amplificación de un medio de comunicación. «No creo que sorprenda a nadie escuchar que soy gay», dijo a la Rolling Stone en 2009.

Ricky Martin , con quien Pablo Alborán compartió un viaje a la India «para coger inspiración», protagonizó una de las salidas de armario más sonadas de la historia del pop. Fue hace ya diez años, cuando sorprendió en una entrevista al desvelar que era gay. «Yo estaba ahogado, el armario pesaba, pesaba, sí, pero mi casa, mi familia, mis amigos, todos sabían que yo era gay. Me desaconsejaron decirlo por mi imagen pública. Pero simplemente, yo necesitaba contárselo al público», dijo el divo puertorriqueño. Otros artistas latinos, como Juan Gabriel , fueron menos explícitos en su salida del armario. En 2012, en una entrevista le preguntaron si era gay y él contestó. «Lo que se ve no se pregunta».

En 2015, el cantante británico Sam Smith reveló que era gay, pero en su caso fue algo más complicado. Cuatro años después, anunció en sus redes que se consideraba «una persona no binaria», y pidió a sus fans que dejaran de referirse a él como «he» («él»), y usaran el pronombre «they» («ellos»).

En el mundo del rap a veces es más complicado, pero hace un año el superventas Lil Nas X contó que era gay a través de varios tuits, en los que aseguraba que siempre había pensado que era «obvio». Algo similar pasa en la escena de heavy metal: demasiada testosterona. A pesar de eso, el cantante de Judas Priest , Rob Halford , salió del armario en una entrevista con la MTV en 1998. «Hay áreas de la música que son más compasivas, más tolerantes, más abiertas, más conscientes, pero creo que voy a destruir el mito de que todas las bandas de metal no tienen esa capacidad de aceptación».

Echando la vista más atrás, casi todas las confesiones de artistas sobre su identidad sexual se produjeron a través de la prensa. Así lo hizo Elton John en 1976, en las páginas de Rolling Stone: «No hay nada malo en irse a la cama con alguien del mismo sexo. Creo que todos somos bisexuales en cierta manera. O sea, ¡a quién le importa!». George Michael prefirió hacerlo por televisión, a través de la CNN: «No siento vergüenza. Me siento estúpido y débil por exponer mi sexualidad de esta manera pero no siento vergüenza», declaró ante la audiencia en 1988. Por aquella época, quien lo estaba pasando mal con el tema era Michael Stipe , cantante de R.E.M., que ya en 2008 se liberó de la carga en la revista Spin: «Fue muy complicado para mi en los ochenta. Fui completamente abierto con la banda y mi familia y amigos y con las personas con las que dormía. Pensé que era obvio».

David Bowie también declaró su homosexualidad en 1972, cuando dijo a la revista Melody Maker : «Soy gay. Siempre lo he sido». Pero unos años más tarde, afirmó que sólo lo dijo porque en esa época «estaba experimentando». Su amigo Freddie Mercury nunca llegó a confesar su secreto públicamente, pero su biógrafa Lesley- Ann Jones asegura que «salió del armario a través de la letra de Bohemian Rhapsody».

Que nunca es tarde para salir del armario es algo que demostraron Chavela Vargas , al hacerlo a los 81 años, o el mítico Barry Manilow , que sus 73 años confesó en una entrevista que llevaba tres conviviendo con su manager, y aseguró que no lo había contado antes por miedo a la reacción de sus seguidores. Quizá alguno hubiera dejado de escuchar su mágica, pero lo más seguro es que no hubiera pasado nada de nada: salvo la excepción de Elton John , que tuvo que cancelar una gira por Estados Unidos por las protestas de grupos ultraconservadores, ninguno de estos artistas sufrió ninguna consecuencia en su carrera tras sincerarse sobre su sexualidad.

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