Rosa María Sardà: su familia, la muerte de su hermano y los hombres de su vida

Este jueves ha fallecido a los 78 años Rosa María Sardà , tal y como ha avanzado Rac1 y ha confirmado la Academia de Cine en sus redes sociales, como consecuencia de un cáncer linfático contra el que llevaba luchando desde 2014, cuando le fue diagnosticado. «El cáncer es invencible, no es una lucha, es una cuestión de que los que se ocupan tengan más o menos tino al programar unas ciertas medicaciones o lo que sea, pero no se trata de un "match" de a ver quién gana, porque el cáncer siempre gana», decía la intérprete en una reciente entrevista con Jordi Évole.

Hija de un campesino y una costurera, Rosa María , habló en una entrevista en «La Sexta» sobre la relación poco fluida que mantuvo con su madre, que murió en 1966: «Yo no le caía muy bien. No le gustaba que yo fuese actriz, tampoco le gustaba cómo yo era. Le hubiese gustado que yo llevara lacitos».

Sardà nunca fue dada a exponer públicamente su vida personal, pero las escasas ocasiones en que hablaba sobre sus seres queridos no escatimaba en halagos hacia ellos. La actriz nunca se casó, según sus palabras, porque siempre quiso «ser libre», pero durante más de tres décadas compartió su amor con Josep María Mainat , del círculo de cómicos del grupo La Trinca, y padre de su único hijo, Pol Mainat .

Pese a que hace años iniciaron caminos separados, el propio Josep María Mainat compartía tras conocerse la noticia del fallecimiento una instantánea familiar, demostrando la buena sintonía que aún existía entre ellos. «Fira de Santa Llúcia, 1980», escribe junto a la imagen, una estampa familiar en la que los tres posan muy sonrientes.

A pesar de no haberse dejado fotografiar juntos prácticamente en ninguna ocasión, la pareja sí habló sobre su hijo en una entrevista en la que aseguraron que no querían que la popularidad ni la fama condicionara a su retoño en la escuela o en las relaciones con sus amigos. Con el paso de los años, la relación con su hijo dio pasó también a una conexión profesional.

Pero su hijo y su expareja no fueron los únicos hombres de la vida de la intérprete, que creció rodeada por sus hermanos: Federico , Javier y Juan . Este último, el más pequeño, murió a la temprana edad de los 26 años como consecuencia del sida. «Eso era el infierno, pero nosotros seguimos viviendo con él y dándole ánimo dos años (tiempo que duró la enfermedad)», recordó en una entrevista en «La Sexta». Hoy, todos sus hombres, han estado a su lado para darle el último adiós.