PRIMER ANIVERSARIO
Qué pasó con la herencia de Doña Cayetana de Alba y en qué estado se encuentra
Solo falta por conocer las últimas voluntades de la duquesa y lo que le corresponderá a Alfonso Diez
«Es obvio que la decisión de realizar la donación de los bienes la he tomado para que mis hijos no tengan más dudas sobre Alfonso », decía Cayetana de Alba en su autobiografía, «Yo, Cayetana». En julio de 2011 —cuando la duquesa llevaba tres años de relación con Alfonso Diez—, Doña Cayetana reunión a sus seis hijos para firmar ante notario el reparto de su herencia en lo que jurídicamente era una donación del registro de la propiedad de sus bienes, que cambiaba de titularidad. « Todos estamos muy contentos . Es una seguridad general para todos», comentó la duquesa a Beatriz Cortázar en ese momento. Esta donación escriturada ante notario, sus hijos recibieron 110 millones de euros cada uno , de una fortuna valorada en 1.000 euros de euros. Además, pasaron a ser los titulares de sus bienes.
Entre su larga lista de bienes Doña Cayetana escrituró que la casa de Dueñas sería para su nieto, Fernando Fitz James Stuart , primogénito de Carlos Alba . Además de asumir la jefatura de la Casa de Alba, el hijo mayor de Doña Cayetana se convertiría en dueño de una gran finca en Córdoba y varias casas para alquilar.
Alfonso Martínez de Irujo , por su parte, recibió la Finca del Castillo de El Tejado y varias fincas rústicas, mientras que su hermano menor, Jacobo Fitz James-Stuart se haría cargo de otras fincas. La Duquesa nombró heredero de la Mansión de las Cañas en Marbella, además de otras fincas, a su cuarto hijo, Fernando y a Cayetano le dejó el Palacio Arbaizenea y el Cortijo Las Arroyuelas, además de otras fincas. La única hija de la duquesa, Eugenia, se convirtió en dueña de la mansión de Ibiza además del Cortijo La Pizana en Sevilla.
Si, tras el reparto, cabía alguna duda de que Alfonso no se quedaría con el dinero y posesiones de Doña Cayetana, la propia Duquesa no dudó en acudir a los medios de comunicación para zanjar las críticas al respecto: «He dado a mis hijos todo mi legado, los tres tercios, y yo dispongo del usufructo hasta que fallezca». «Está dispuesto para que no se pueda sacar nada de mis palacios, puesto que no quiero que pierdan el interés cultural que después de tantos años se ha conseguido reunir».
¿Qué pasa con Alfonso Diez?
La herencia de doña Cayetana siempre fue un punto de desencuentro a la hora de que sus hijos aceptasen una boda con Alfonso Diez. Tres meses después de aquella donación en vida, el 5 de octubre de 2011, la duquesa contrajo matrimonio con su tercer marido, Alfonso Diez, 25 años más joven que ella. Tres años después de aquel enlace, la duquesa fallecía en la Casa de las Dueñas.
Repartida en vida la herencia, solo falta conocer las últimas voluntades de la duquesa de Alba, de donde a Alfonso le corresponderá un porcentaje del 26 por ciento del usufructo que tenía Cayetana. La duquesa siempre repetía que, el día que le pasara algo, Alfonso tendría que recibir una pensión digna para poder vivir. Lo dijo, pero no lo firmó en el testamento oficial. Tal y como informó Beatriz Cortázar, aunque en un primer momento en la Casa de Alba decían que era muy poquito lo que le había quedado a Cayetana, finalmente se han tasado una serie de cuadros que estaban en su mayoría en el palacio de Monterrey y que no forman parte del inventario de la Fundación. Según algunas tasaciones, el importe de esas obras de arte podría ascender a 18 millones de euros y habría que repartirlos entre los seis hijos y dar al viudo su porcentaj e.
Sin embargo, antes de que la duquesa le diera el «sí, quiero» a Diez, éste tuvo que firmar un papel por el que renunciaba a «cualquier título, derecho y honores» de su futura mujer. Aunque el funcionario se acaba de jubilar y podría recibir en torno a 1.800 euros de pensión . Una cifra que no es del todo cuantificable si se desconocen los años que ha cotizado. Diez también recibirá 2.000 euros de la Fundación Casa de Alba.
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