Paris Hilton confiesa los abusos que sufrió en el internado

Cuando Conrad Nicholson Hilton compró su primer hotel en Texas 1919 jamás pensó que acabaría teniendo un imperio hotelero de tal magnitud y, seguramente, tampoco llegó a imaginar que su apellido aparecería en las páginas de la prensa rosa. Pero su bisnieta Paris Hilton ha dado para rellenar páginas y páginas. La socialité, que en unas semanas cumplirá 40 años, siempre ha estado inmersa en continuas polémicas desde que se dio a conocer en el reality «The simple life» que protagonizó con su amiga Nicole Richie para la FOX entre 2003 y 2006 y en el que también aparecía la mismísima Kim Kardashian. Se convirtió en una de las primeras influencers gracias al personaje frívolo en el que se enfundó y que terminó por superarla, como así reconoció el pasado año en su documental, «This is Paris»: «A veces no sé quién creó este personaje al que llevo pegada tantos años. Yo no era así».

Pero esa vida perfecta (y superficial) de rica heredera no siempre fue así. Creció en un entorno muy conservador y fue criada para ser una chica discreta, aunque después transcurriese por un sendero muy diferente. En su adolescencia lo pasó especialmente mal . En dicho documental reconoció por primera vez algo que había guardado en su interior desde entonces: sufrió abusos físicos y emocionales en una de las «escuelas de crecimiento emocional» a la que fue enviada por sus padres.

«Hacían que la gente se quitara la ropa y entrara en una habitación durante unas 20 horas. Me sentí como si me estuviera volviéndome loca. Alguien estaba en la otra habitación, había como una camisa de fuerza... Me estaba congelando, me estaba muriendo de hambre, estaba sola. Tenía miedo», aseguraba hace unos meses sobre lo vivido en la escuela Provo Canyon de Utah, Estados Unidos. Nunca lo había contado hasta entonces, ni siquiera a sus padres, y no ha sido hasta este jueves cuando ha vuelto a hablar de los terribles episodios.

Paris Hilton ha compartido un vídeo en Instagram de cuando tenía 18 años justo después de regresar del internado en el que, supuestamente, abusaron de ella. Muestra en las imágenes un rostro sombrío y triste mientras posa con unos pantalones, una camiseta y gorra en color oscuro con el logotipo de la policía de Nueva York. «Puedo ver el dolor en mis ojos» , escribe la socialité. Asegura que estaba «tan traumatizada» que fingió que todo estaba bien para tratar de «bloquear los recuerdos dolorosos». Y añade: «Mirando esto ahora, sé que mi adolescente estaría increíblemente orgullosa de la mujer que soy hoy ».

La intención de Paris Hilton es que este «centro de salud conductual» -como así se definen en su propia página web- eche el cierre: «Ser valiente y usar mi voz para marcar la diferencia y salvar a los niños de tener que soportar el abuso que yo misma sufrí, al igual que muchos otros han tenido que pasar».

Desde el colegio aclaran -a través de su página web- que no son aptos para contestar a nada porque compraron el colegio en el año 2000 y nada tienen que ver con las prácticas anteriores. «Estamos comprometidos a brindar atención de alta calidad a los jóvenes con necesidades especiales y, a menudo, complejas, emocionales, conductuales y psiquiátricas», se puede leer.