El nieto de Adolfo Suárez perpetúa la tradición taurina familiar

El joven de 20 años debutó el pasado domingo en la plaza, pero no pretende dedicarse a ello de forma profesional

UAT
Ana Mellado

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Son muchas las tardes que Adolfo Suárez Flores (20 años) ha acompañado a su padre en su barrera del «2» de Las Ventas para contemplar las faenas de grandes maestros en San Isidro. Adolfito, como le conocen en su entorno cercano, pasó gran parte de sus veranos en El Palomar, la finca de su abuelo materno, el ganadero de bravo albaceteño Samuel Flores . Soñaba con el día en que saltaría al ruedo y por fin llegó. El pasado domingo debutó como torero en un festival en la localidad de Povedilla, en Albacete, que organiza la familia Flores desde hace cuarenta años.

Adolfo hizo el paseíllo junto a Enrique Ponce , Javier Conde , Toñete y Luis David Adame . No se le dio nada mal la tarde. Cortó las dos orejas y el rabo de su novillo y destacó por su reposo, templanza y buen gusto. Dando el pecho al novillo y rematando su actuación con una gran estocada, la mejor de todo el festejo.

Suárez brindó el toro a su padre Adolfo Suárez Illana , que presenció el festejo acompañado de uno de sus grandes amigos, el torero Juan José Padilla .

Ahora bien, el joven Adolfo no pretende convertir su pasión en una vocación profesional. Según ha podido saber ABC, su idea es torear en un festival al año y continuar volcado en sus estudios de Derecho y Relaciones Internacionales. Suárez Flores continúa la tradición taurina que corre no solo por parte de su familia materna, sino también paterna. Aunque el apellido Suárez pesa más por su significado político, tanto el primer presidente de la democracia, Adolfo Suárez González , como el hijo de este, torearon públicamente en la plaza.

El expresidente se vistió de corto en el verano de 1959, en la plaza de Ávila, en el llamado Festival de Noveles. Relatan los escasos documentos que se conservan que la faena de aquel chico de Cebreros, como se dio a conocer en el cartel, «estuvo valiente, que no le cogió el novillo y lo mató a la segunda». Escueta valoración pero contundente. Aquella tarde fue la primera y la última de la efímera carrera en los ruedos de Adolfo Suárez, al que le aguardaba fuera uno de los toros más difíciles de la historia de España, el de la Transición. La afición del expresidente estuvo, en gran parte, alentada por su compañero de pupitre e íntimo amigo Victoriano Valencia , suegro del diestro Enrique Ponce, amigo de las dos familias.

La segunda generación Suárez, el número tres en la candidatura del PP por Madrid, toreó durante veinte tardes a lo largo de siete años. Además fue el primero de la familia en emparentar con el mundo taurino al contraer matrimonio en 1998 con Isabel Flores, hija del conocido ganadero Samuel. Suárez dijó adiós a los ruedos con una salida a hombros en Espartinas, Sevilla, en el año 2007. Una tarde repleta de emociones que sin duda r evivió el pasado domingo .

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación