El «milagro» de Chiara Ferragni: recaudación millonaria contra el coronavirus
La bloguera y su marido Fedez son a menudo criticados en las redes sociales. Pero esta vez han recibido el aplauso general
La opinión pública italiana responde con disciplina a la alarma contra el coronavirus , al tiempo que se desencadena una ola de solidaridad para ganar la guerra que se ha declarado contra el coronavirus. Las redes sociales están jugando un papel fundamental. Lo demuestra la campaña para comprar maquinaria destinada a terapia intensiva en el hospital San Rafael de Milán, promovida por Chiara Ferragni (32 años), empresaria de moda y conocida bloguera –una las más seguidas del mundo, con casi 18 millones de fans en Instagram-, y su marido, el rapero italiano Federico Leonardo Lucia , conocido como Fedez (30), con 9,3 millones de seguidores en la misma red social.
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El matrimonio hizo la primera donación: 100.000 euros. En tan solo 11 horas recaudaron dos millones de euros de 110.000 donantes en la web «gofundme». La mayoría de los donativos eran cantidades modestas, de 5, 10 y 20 euros. Pero se añadieron también numerosas personas del mundo del espectáculo, que relanzaron la iniciativa en sus perfiles en las redes sociales, invitando además a sus seguidores a permanecer en sus casas. El objetivo inicial, que era de 3 millones de euros, se logró en menos de 24 horas. Pero la gente ha continuado haciendo donativos. En cuatro días, hasta el viernes, habían recaudado casi 4 millones de cerca 200.000 donantes .
Este fue el llamamiento que hicieron Ferragni-Fedez: «En este delicado momento en el que nos encontramos, desde un punto de vista social y de salud, nosotros también podemos hacer algo. Los médicos y científicos están haciendo un trabajo muy importante y nos gustaría apoyarlos de manera concreta. Por esta razón, hemos lanzado este crowdfunding cuyos fondos irán destinados a la activación de una nueva terapia intensiva en el Hospital San Raffaele de Milán». El comunicado especificaba las necesidades más urgentes: «En este momento, los equipos necesarios para triplicar las camas de cuidados intensivos y semiintensivos son: Equipos de ventilación, dispositivos de ventilación no invasivos y diversos tipos de monitores». Concluía la pareja señalando que «incluso una pequeña donación puede marcar la diferencia», subrayando que «los fondos recaudados serán donados directamente al hospital para ayudar a la unidad de cuidados intensivos».
La bloguera y su marido Fedez son a menudo criticados en las redes sociales. Pero esta vez han recibido el aplauso general. La gran repercusión mediática que ha tenido su campaña, ha llevado a Chiara Ferragni a escribir un post en Instagran dirigido también a sus seguidores extranjeros, con una advertencia: El coronavirus « no es una gripe, no deis mensajes equivocados ». La Ferragni ha explicado la evolución que ha tenido en Italia la idea de la epidemia: «También en Italia al inicio hemos hecho el mismo error, pensando que se trataba de una gripe para muchas personas, pero hemos tenido que aprender de forma mucho más dura que era mucho más que eso».
Grazie alla campagna solidale di @Fedez e @ChiaraFerragni e alle 191mila persone che hanno donato sono partiti all’Ospedale San Raffaele i lavori per una nuova terapia intensiva da campo dedicata all’emergenza #coronavirus. pic.twitter.com/V8nNI1eLEa
— San Raffaele Milano (@SanRaffaeleMI) March 14, 2020
Solidaridad para ganar la batalla
Los italianos están preocupados, pero no se quedan paralizados por el miedo que les embarga. Está surgiendo en el país un espíritu solidario, con una sacudida de orgullo, conscientes de que Italia es un gran país y que forman una comunidad que si permanece unida y compacta ganará esta guerra contra el coronavirus. Esa confianza de los italianos se refleja en otra campaña que se extiende en todo el país para mostrar su esperanza sobre el futuro. El mensaje que ha llegado a toda Italia tiene tres palabras: «Tutto andrà bene» ( todo irá bien ). Se escribe, junto a un corazón, en pancartas que se exhiben en balcones y en las casas. En pequeñas hojas de papel autoadhesivo el mensaje se propaga por manos anónimas en árboles o carteleras publicitarias, con efecto multiplicador al llegar también a la televisiones, a todos los medios de comunicación y a las redes sociales. La idea es de una poetisa que ha querido permanecer anónima porque, según ha dicho, «es importante el gesto, no la persona». Sabia decisión, porque así el mensaje tiene aún más fuerza, pues todos lo adoptan como propio. En todo caso, la firma ya se la puso John Lennon : «Al final todo acabará bien; y si no va bien, significa que todavía no es el final».